Ahora resulta que, en “La Cruzada Contra el Hambre” aparecieron como importantes organizadores la Pérsico y la Nestlé. Esto está para Ripley, o mínimo para Kafka, pues estas mismas empresas han participado en aumentar la obesidad en México. Aclaremos: obesidad no es sinónimo de nutrición. Y para acabar, la hermana de Rosario Robles, cuyo nombre es Magdalena, participa en esta cruzada, siendo que la cínica de la hermana trabaja para la Pepsico. La corrupción y la persecución de los votos son claramente lo que mueve a esta méndiga cruzada…
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CRUZADA DE OBESIDAD
Ya salió la porquería
en “Cruzada contra el hambre”.
La verdad no tiene nombre
que el control, de esta, la haría
la misma piratería
causante de obesidad
a gentes de corta edad
y a adultos, con alimento
que engorda, que es un contento,
con manteca a bastedad.
Piratas trasnacionales
solo buscan el negocio,
no tienen ningún aprecio
por salud de mis carnales,
que esqueléticos los tales
con chatarra se atragantan
y un poco el hambre la espantan
creyendo que ya comieron
con miserias que compraron
a Pérsico y a Nestlé,
ya luego harán el cliché
que el hambre al fin abatieron.
Es un maléfico asunto
por Salinas orquestado
que utilizó en el pasado:
“Solidaridad” presunto
inservible en su momento,
es de nuevo redivivo
siendo el voto real motivo
y el hambre como pretexto
en un tinglado bien puesto
de por sí televisivo.
Rosario Robles Berlanga
-que a Ahumada sirvió de cena-,
con su hermana Magdalena
-que en Pesi sueldo debenga-
organizan la pachanga
con Pérsico y sus productos,
son de corrupción viaducto,
usando a pobres de escusa.
Si la raza no está buza,
serán de estas, usufructo.
¡Ah! México, raza ilusa
que votó por Peña Nieto.
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