10 de julio de 2013

DESCARADOS DE EE UU aseguran que el espionaje a Brasil no entorpecerá sus relaciones | Internacional | EL PAÍS

EE UU asegura que el espionaje a Brasil no entorpecerá sus relaciones | Internacional | EL PAÍS:
El Departamento de Estado no responde públicamente a las exigencias de explicaciones por parte del Gobierno de Rousseff
EVA SAIZ Washington 8 JUL 2013 - 21:47 CET39
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La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, saluda al vicepresidente de EE UU, Joe Biden, el pasado mayo en Brasilia. / AP

Brasil se ha convertido en el último foco de tensión diplomática de Estados Unidos a cuenta de las informaciones sobre sus prácticas de vigilancia a terceros países difundidas por Edward Snowden. Si con las filtraciones sobre el espionaje a Europa, el presidente del país, Barack Obama, y su jefe de Diplomacia, John Kerry, salieron al paso de las acusaciones públicamente, en este caso, EE UU ha preferido mantener la reserva y trata de que el episodio no entorpezca su relación bilateral. El Departamento de Estado ha asegurado este lunes que está abordando el asunto de la presunta recopilación masiva de datos de ciudadanos brasileños, destapado por O Globo este fin de semana, a través de las vías diplomáticas.

“No vamos a comentar en público nada que tenga que ver con cuestiones de inteligencia”, ha advertido la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, en la conferencia de prensa diaria. Psaki ha eludido en todo momento referirse a la exigencia de explicaciones solicitada a Washington por el ministro de Relaciones Exteriores brasileño, Antonio Patriota, este domingo. “Estamos tratando el asunto a través de las vías diplomáticas”, ha asegurado la portavoz del Departamento de Estado.

Psaki ha eludido en todo momento referirse a la exigencia de explicaciones solicitada a Washington por el ministro de Relaciones Exteriores brasileño, Antonio Patriota
Este fin de semana O Globo, en colaboración con el diario británico The Guardian, desvelaba el espionaje indiscriminado a millones de ciudadanos brasileños a través de una base -la única en América Latina- de la red de estaciones de vigilancia que EE UU tendría desplegada, según la información, por todo el mundo. La captación de datos se habría producido a través de una gran empresa estadounidense del sector de las telecomunicaciones y de sus acuerdos con otras operadoras, incluidas las brasileñas, que le garantizaba el acceso a las redes de comunicación

La filtración del último capítulo de las técnicas de espionaje de EE UU se produce apenas tres meses antes de que Dilma Rousseff realice su primera visita oficial -y la primera de un líder brasileño en 20 años- a este país desde que accediera a la presidencia de Brasil. El Departamento de Estado se ha mostrado confiado en que estas revelaciones no dañarán la relación ni tampoco el objeto del viaje de la mandataria brasileña. “Vamos a seguir trabajando con Brasil en todas las materias y acuerdos en los que hemos abierto un diálogo”, ha asegurado Psaki.

Tras la etapa de desencuentro entre EE UU y Brasil que marcó la presidencia de Luis Inácio Lula da Silva, las relaciones entre ambos países han mejorado sensiblemente, si bien su cooperación ha estado marcada por desencuentros políticos y económicos. Durante su visita el pasado mes de mayo al país sudamericano, el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, dejó clara la importancia de Brasil, no sólo en la región sino a nivel mundial, y escenificó el nacimiento de una nueva etapa en ese vínculo bilateral. “Espero que 2013 sea el inicio de una nueva para los dos países”, señaló Biden. Rousseff, por su parte, ha evitado tratar con Irán y ha mantenido cierta distancia con Venezuela, uno de los países más críticos con Washington. Brasil también fue de los primeros países en rechazar la solicitud de asilo de Snowden.

El Departamento de Estado no tiene constancia de que Brasil haya requerido la presencia de su embajador en el Senado
“El Gobierno está muy preocupado por las informaciones relacionadas con el hecho de que las comunicaciones telefónicas y electrónicas de nuestros ciudadanos sean objeto del espionaje de agencias de inteligencia de EE UU”, señaló Patriota. Está previsto que este martes el comité de Relaciones Exteriores del Senado de Brasil se reúna para solicitar la comparecencia del ministro del ramo y del embajador de EE UU en Brasilia, Thomas Shannon, en relación con los programas de vigilancia estadounidenses.

El Departamento de Estado no tiene constancia de que Brasil haya requerido la presencia de su embajador en el Senado -una petición un tanto inusual porque no es común que los jefes de las misiones diplomáticas comparezcan en comisiones de países extranjeros- pero, de acuerdo con Europa Press, la Embajada estadounidense en Brasil ha informado de que espera órdenes de Washington.
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