Exigen trabajadores renuncia de Calderón, Baeza y Ferriz
Araly Castañón
El Diario | 02-05-2010 | 00:02 | Local
Más que plantear demandas laborales, los trabajadores de Juárez que participaron ayer en el desfile del 1 de Mayo, se enfocaron a exigir a través de sus mantas y cartulinas, paz y seguridad.
El contingente más grande fue el de los trabajadores de la educación, y precisamente un grupo de maestros, del grupo disidente Resissste, rompió el esquema oficial del desfile cuando uno de ellos, vestido con ropa tipo militar y una máscara de Felipe Calderón ensangrentada, tomó el micrófono de los comentaristas del evento y exigió la renuncia del presidente de la República, del gobernador José Reyes Baeza y del alcalde José Reyes Ferriz.
“No han cubierto las necesidades de nuestro pueblo. Estamos exigiendo que se quiten los trajes y escuchen el clamor de los vecinos”, expuso.
El grupo llegó hasta el templete a bordo de un auto con sonido, en cuyo techo llevaban una piñata con una figura que en el estómago tenía la insignia del nazismo y en una tira de papel el texto “Calderón”. Los manifestantes prendieron fuego a la piñata frente a los líderes sindicales y las autoridades locales; esto ocurrió mientras el hombre que iba disfrazado de Calderón tomó el micrófono.
Mientras gritaba “renuncien, renuncien” y era coreado por los demás reclamantes, las autoridades y líderes sindicales abandonaron el estrado de inmediato, para dar por terminado el desfile de los trabajadores.
También participaron en la parada obrera, empleados de maquiladoras, de la educación, transportistas, harineros, panificadores y repartidores de agua potable, entre otros.
Llamó la atención que a diferencia de otros años, en esta ocasión muchos de los trabajadores se hicieron acompañar de sus familias, lo que incrementó de manera considerable el número de participantes.
Exhibieron mantas y pancartas con leyendas como “Los trabajadores cetemistas repudiamos la violencia, no más crímenes”, “Exigimos paz social” y “Queremos gobernadores que nos garanticen seguridad, empleo, educación y un mejor mañana para nuestros hijos”.
Al final del evento, el alcalde dijo en entrevista que todos los grupos tienen el derecho de manifestarse, y que todos fueron escuchados con atención.
“Debemos escuchar a todos los ciudadanos, pero desfilaron 40 mil ó 50 mil trabajadores y al último llegaron unas 20 personas que se manifestaron”, expuso Reyes Ferriz sobre los maestros que solicitaron su renuncia.
Durante el desarrollo del desfile, los trabajadores del transporte público de pasajeros reclamaron las muertes de 30 compañeros ruteros asesinados durante el año pasado y en lo que va de presente, en ataques directos, asaltos o accidentalmente al pasar por un enfrentamiento entre criminales.
El coordinador sindical de los transportistas adheridos a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Mario Téllez, expuso que aunque en los camiones trabajan policías encubiertos para prevenir asaltos, se necesitan acciones más fuertes para evitar más muertes.
“Los maleantes ya están subiendo de tono en sus acciones, ya no traen garrotes para asaltar, ya son personas armadas con pistolas o rifles en casi todos los casos”, mencionó.
Para hacer patente su solidaridad con familiares y amigos de sus compañeros caídos, y como una protesta por la inseguridad que afecta todos los ámbitos en esta ciudad, los trabajadores del transporte portaron moños amarillos y pancartas con consignas alusivas.
La marcha inició a las 8:30 horas en el cruce de las calles Constitución y 16 Septiembre, continuó por esa vía hasta la Mariscal, en donde se instaló el palco de los invitados, encabezado por líderes sindicales, el alcalde José Reyes Ferriz, funcionarios municipales y el candidato común a gobernador del PRI, PT, Verde Ecologista, Panal y Convergencia, César Duarte.
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