DE LA JORNADA:
México SA
Calderón busca repetir los fracasos de Fox
Josefina Vázquez Mota, del equipo del presidente electo Felipe Calderón, entregó en las oficinas del PRI la Agenda Legislativa, que fue recibida por el secretario particular de la presidencia de ese partido, Jorge Trujillo Foto José Antonio López
Vicente Fox ya nada quiere saber de su gobierno ("cerramos la cortina"), pero no pierde impulso ni oportunidad para meter la garra en el siguiente, el mismo que intenta o aparenta armar el mini presidente electo. En el cuarto de al lado, Felipe Calderón de plano no ata ni desata, no arranca ni sale de su covacha, pero ya anuncia que, dados "los avances" registrados en el "cambio", seguirá "la misma estrategia" del actual inquilino de Los Pinos para resolver, dice, los problemas prioritarios del país, los mismos que el de las botas, con su "estrategia", lejos de solucionar agravó.
Uno se va, pero no se quiere ir. Otro entra, pero le da pánico abrir la puerta. Y a su vera el río se desborda. El primero fracasó en su programa económico, en su programa de empleo, en su programa de bienestar social y en su programa de combate a la pobreza, entre muchos otros fracasos; pero el segundo, dados "los avances" registrados en el "cambio", seguirá "la misma estrategia", es decir, repetirá los fracasos.
Problema de ellos y sus carencias, si no estuviera el país en riesgo. Entonces, ¿qué programas "exitosos" copiará Calderón de Fox; cuáles incluirá; qué estrategia seguirá, si el fracaso -especialmente en los programas sociales- es rotundo? Todo indica que padeceremos un segundo sexenio perdido consecutivamente, porque el michoacano repetirá esquemas sobradamente ineficientes en crecimiento económico, generación de empleo y, en fin, combate a la desigualdad social.
El gobierno del "cambio" celebra su "reducción" de la pobreza, aunque para combatirla a lo largo del sexenio no generó empleo, no creció económicamente, no repartió la riqueza, no mejoró el ingreso. El mini presidente electo asegura que le "indigna, lastima y duele" la miseria en que viven 20 millones mexicanos (antes de empezar ya recortó el número de pobres), pero se declaró "convencido" de los "avances sustanciales" en reducción de la pobreza extrema en el país durante la administración foxista ¿Cómo -sin empleo, crecimiento económico, mejor ingreso y la riqueza más que nunca concentrada- se dieron esos "avances sustanciales? A golpe de micrófono, demagogia pura, y seguirá con la "estrategia".
El presidente que no se quiere ir prometió la creación de 8 millones 100 mil empleos formales a lo largo del sexenio; si llega a un millón (eventuales, la mayoría de ellos) serán muchos. El presidente que no quiere abrir la puerta se comprometió con un millón anual durante su administración, y para lograrlo seguirá la misma "estrategia" del gobierno foxista, de tal suerte que el número de mexicanos que durante el "cambio" terminó en Estados Unidos fácilmente se duplicará a lo largo de la "continuidad", lo mismo que los ocupados en el sector informal, por mucho que Fox y Calderón se auto reconozcan como "presidentes del empleo".
Al cierre del "cambio", 60 por ciento de los ocupados en el país -empleo formal e informal- obtiene un ingreso nunca mayor a tres salarios mínimos (138 pesos, aproximadamente). Pero el de la "continuidad" mantendrá la "estrategia", y ya encarrerado repetirá Oportunidades y sus 3 pesos con 59 centavos diarios por "beneficiario". Eso sí, con una estabilidad macroeconómica verdaderamente envidiable -así sea rentada- y miles de millones de dólares en reservas internacionales reposando en el Banco de México.
Esa es la "clase media" presumida por el gobierno foxista ("mediante la construcción de una verdadera clase media se tendrá el mejor garante de la sobrevivencia de la democracia, de la paz y la tranquilidad", Fox dixit). Si los clasemedieros del "cambio" obtienen un ingreso máximo de 138 pesos diarios, ¿cómo estarán los depauperados? Pero la "estrategia" seguirá.
Al estilo del Acuerdo de Chapultepec (Carlos Slim performance), el mini presidente electo difunde su "agenda nacional", y entre sus "ejes temáticos" aparecen estado de derecho (otra vez la promesa de "peces gordos" que, con Fox, no llegaron ni a charales); la economía competitiva (léase competitividad por medio de menores salarios y peores condiciones laborales) que genere empleo (de pésima calidad y sin prestaciones); igualdad de oportunidades (los de Forbes al padrón de Oportunidades), y democracia, mucha democracia "de para y por los empresarios".
Como en el performance de Slim, en la "agenda nacional" calderonista ni una sola palabra, frase y/o programa para distribuir el ingreso y la riqueza, acabar con la impunidad de los barones, erradicar sus privilegios, es decir, la misma "estrategia" de Vicente Fox y su gobierno del "cambio".
En algo tiene razón el presidente saliente (el que no se quiere ir), cuando advierte que "el país no puede volver a estar en manos de la demagogia". Sin embargo, aquí la "estrategia" no le funcionó, porque sí se "pudo volver" y el presidente que no quiere abrir la puerta va por el mismo camino seguido por el demagogo Fox.
Las rebanadas del pastel:
Dice monseñor Abascal que "si es necesario" se usará la fuerza pública para "solucionar" Oaxaca. Eso sí, con "medida y límites". Es decir, les vamos a romper la madre, pero nomás tantito... No pueden con la capital de un estado de la República ¿Qué pasaría si se alza la República entera?
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