Por: Luis Héctor Picón
Actualmente existe una gran crisis política y democrática en nuestro país, consciente o inconscientemente, pero es vivida en una realidad innegable y aunque se debe a múltiples factores, bajo este escenario la oposición o la llamada “izquierda” no ha dejado de cometer errores y carga con muchos vicios que no ha sabido superar.
La autocritica es indispensable, proceso para alcanzar la democracia.
¿Qué hacer?
Cambiar el discurso ya trillado.
Cuando hablas con la gente la inmensa mayoría te dice no le gusta la política, le desagrada, catalogando a todos por “iguales” y así, en general, vemos casi siempre a nuestro alrededor mucha indolencia y resignación a adaptarse al sistema.
No necesitamos “marear” a la gente hablando simplemente de “izquierdas” o “derechas”, debemos despertar la consciencia de clase, haciendo saber que lo que se trata es de dignidad, de nuestros derechos, de explotados y explotadores, de pocos multimillonarios y de millones de pobres, de proteger nuestra vejez y el bienestar de las futuras generaciones. Hay que dejarnos de dogmas pero sin dejar las ideologías, la información y los medios alternativos e independientes son indispensables.
Todos tenemos nuestros propios conceptos y son inseparables, pero busquemos un lenguaje más cercano a la gente, pues el dominio mediático ha creado una inmensa torre de babel.
¿Socialismo verdadero?
fuente: http://nopal-informativo.blogspot.mx/2013/06/la-izquierda-es-la-esperanza.html
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