Ahora, en Taksim estamos las mujeres

"Ahora, en Taksim estamos las mujeres":
'Corre, Tayyip, que vienen las mujeres' o 'Cállate, Tayyip, que ahora hablan las mujeres' o '¿De veras quieres que tenga tres hijas y salgan como yo?', en respuesta a la petición de Erdogan de que cada mujer debe tener al menos tres hijos.

Estos son algunos de los lemas coreados ayer por las miles de mujeres que llenaron la plaza Taksim de Estambul para protestar contra el Gobierno turco y, especialmente contra el machismo y la misoginia integral de su presidente, Recep Tayyip Erdogan.

Las mujeres están cabreadas porque desde hace diez años son el blanco de ataque de todos los discursos de Erdogan, como cuando quiso prohibir el aborto. Critican que el actual Gobierno no ha hecho nada para atajar el acoso que sufren en el espacio laboral. "En la oficina tienes que ir 'decente', muy seria, más vale no reirse en voz alta si quieres que te respeten", dice una periodista.

Pero en el parque Gezi, origen de la oleada de protestas, todo es diferente, y las chicas pueden vestir, bailar y reír como quieren. El parque también se ha convertido en un espacio de pedagogía. "Mucha gente que viene aquí nunca ha escuchado a las feministas, no se han planteado lo que significa el acoso, lo que es ser una mujer en un espacio público, pero espero que aprendan. Aquí estamos nosotras para convertir el respeto en algo normal", añade la joven.

Pero las mujeres también trabajan contra el sexismo dentro del propio movimiento e incluso una comisión se ha dedicado a tapar los numerosos insultos a Erdogan que utilizan estereotipos sexistas. En una carpa feminista, uno de los numerosos tenderetes de movimientos sociales que salpican el parque Gezi, convertido en un inmenso espacio de talleres y encuentros asamblearios, hay incluso citas para crear y compartir nuevas palabrotas.

Tienen la experiencia de Tahrir, en El Cairo, donde las mujeres acabaron sufriendo severos abusos y no quieren que se repita en Taksim, para lo que organizan talleres donde las mujeres aprendan cómo defenderse contra el acoso.

Y las cosas empiezan a cambiar. "Llevo una semana metiéndome en una muchedumbre increíble en Taksim y no he sufrido nada de acoso, cuando normalmente me pasa cada dos por tres al salir de casa", afirma una psicóloga de 30 años.

Pero la revuelta ha elevado su confianza en ellas mismas. "Estos días las mujeres salen por las noches sin necesidad de ningún acompañante masculino, se sienten fuertes, porque saben que hay más mujeres, que nos ayudaremos mutuamente. Ahora, en Taksim estamos las mujeres", afirma.

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