"Me estoy acercando a la muerte y todavía no he podido creer en Dios". Así se expresó este sábado el presidente de Uruguay, José Mujica, con motivo de su próxima visita al Vaticano el 1 de junio.
Mujica explicó los motivos por los que no asistió a la investidura del papa Franciso. "No soy creyente, por esa razón, por respeto a los creyentes, por respeto político a la Iglesia Católica, a la que admiro, dispuse que fuera el señor vicepresidente, que sí es católico", afirmó.
El presidente uruguayo añadió que la reunión con el papa es importante para la paz. "En Colombia hay una discusión muy fuerte; no sabemos si saldrá o no de esta encrucijada. Colombia es, como todos los países del Caribe, mayoritariamente católico. Le quiero transmitir al papa mi preocupación, de que en nombre del catolicismo haga todo lo que pueda para ayudar al pueblo colombiano", resaltó.
El obispo de Salto, Pablo Galimberti, ha cuestionado algunos de los temas que Mujica quiere hablar con el papa. "Nuestro presidente ha adelantado que desea plantearle que los obispos colaboren en la implementación de planes de vivienda. Respecto a esto he manifestado mis discrepancias", señaló Galimberti.
Agencias
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