30 de enero de 2013

La nueva justicia de la Suprema Corte: A una posible delincuente francesa la liberaron, pero bajan switch al SME con burdo TECNICISMO

La “nueva” justicia de la Suprema Corte: A una posible delincuente francesa la liberaron, pero “bajan switch” al SME:
El argumento principal del proyecto es que el Ejecutivo no era el patrón del SME, sino los directivos de LFC
Víctor Fuentes / Reforma
Ciudad de México (30 enero 2013).- El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) podría quedarse hoy sin energía.
La Suprema Corte de Justicia discutirá este día un proyecto de sentencia que niega la posibilidad de que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se convierta en patrón sustituto del SME.
Además, confirma en definitiva la terminación de las relaciones laborales con este gremio, que agrupa a 16 mil electricistas.



El proyecto, elaborado por el Ministro Luis María Aguilar, propone revocar el amparo otorgado al SME por un tribunal colegiado de circuito, que el pasado 13 de septiembre resolvió que la CFE debe ser patrón sustituto del SME porque no se dio la causa de fuerza mayor para justificar el cese de las relaciones de trabajo.
Fuentes de la Corte dijeron que el proyecto sostiene que el tribunal colegiado se equivocó en su interpretación sobre la estructura de la Administración Pública, pues Luz y Fuerza del Centro (LFC) era una organismo descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios.
Por tanto, no dependía jerárquicamente de manera directa del Presidente de la República.
En otras palabras, explicaron las fuentes, el Presidente no era el patrón del SME, sino los directivos de LFC, quienes no tuvieron posibilidad alguna de prevenir el decreto de extinción emitido por Felipe Calderón en octubre de 2009, de ahí que sí existió causa de fuerza mayor.
“El contrato colectivo y las negociaciones las llevaban funcionarios de LFC con el sindicato, y el régimen laboral era el del Apartado A del Artículo 123 de la Constitución, que no es el aplicable a los burócratas que son directamente subordinados al Ejecutivo”, agregó una fuente.
El caso será discutido en la Segunda Sala de la Corte, donde solo se requerirá el voto de tres de los cinco ministros para aprobar o desechar el proyecto.
De revocarse el amparo, quedará firme el laudo dictado en agosto de 2010 por la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje que dio por terminada la relación laboral con el SME y el contrato colectivo de trabajo de LFC, y de hecho será el final de los litigios relacionados con este asunto, pues el Pleno de la Corte avaló por unanimidad el decreto de extinción en 2010.
En su fallo de septiembre, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo no hizo mención alguna a la naturaleza de órgano descentralizado de LFC, sino que se limitó a exponer que la causa de fuerza mayor no era aplicable porque la razón de la extinción de la empresa fue su incosteabilidad, y ésta se pudo haber evitado con una “administración eficiente”.
Si una mayoría de Ministros se pronuncia en contra del proyecto, será desechado y turnado a un integrante de la mayoría, que en breve presentaría una nueva propuesta en el sentido de confirmar el amparo.
En este escenario, la JFCA tendría que dictar un nuevo laudo declarando a la CFE como patrón sustituto, aunque en la práctica, la paraestatal podría alegar que le resulta imposible cumplir este mandato, y la Ley Federal del Trabajo prevé que en ese caso se pague una indemnización adicional a los afectados.

‘¿Necesitamos ser franceses?’

A tono con la liberación de la francesa Florence Cassez, Martín Esparza, líder del SME, recordó ayer a la Corte que el sexenio de Felipe Calderón violó los derechos humanos de sus agremiados durante la toma de Luz y Fuerza del Centro con la irrupción de elementos de la Policía Federal.
“¿O qué, necesitamos ser franceses? Se violó nuestro debido proceso porque nunca fuimos notificados como trabajadores ni como sindicato.
“Después vimos a Felipe Calderón diciendo en cadena nacional ‘lo hacemos por el bien público y el interés nacional’. Habría que resistir para demostrarle al pueblo de México que la acción de Calderón era una acción equivocada, fuera del marco constitucional y legal violando los derechos humanos de los trabajadores”, expuso Esparza frente a la Corte.
El SME apostó sus últimos cartuchos con una marcha a Los Pinos y una acampada en el Zócalo, como medidas de presión a los Ministros de la Corte, que este miércoles definen el futuro de ese gremio.
Por la mañana, Esparza y sus abogados entregaron a la Suprema Corte una carta abierta firmada por cientos de organismos y personalidades que apoyan la restitución de sus derechos laborales.
“El SME sigue vivo gracias a todos los compañeros que no aceptaron las migajas de la liquidación, a aquellos jubilados que han venido a apoyarnos en la resistencia y éste es el reconocimiento a la lucha de más de tres años”, lanzó Esparza frente a las instalaciones del máximo órgano judicial.
El líder electricista convocó luego a una marcha a Los Pinos.
A su paso por Avenida Reforma, Esparza caminó escoltado de sus brazos políticos Humberto Montes de Oca y Fernando Amezcua, quienes han ocupado distintos cargos dentro del SME.
Los gritos de batalla se centraron en la resistencia de tres años y en las exigencias a los Ministros de la Corte de desechar el recurso de revisión del Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) y dejar en firme la sentencia de un tribunal federal que le restituye sus derechos como trabajadores electricistas.
En Los Pinos, el líder sindical fue recibido po Ricardo Martín, de la oficina de Atención a Movimientos Sociales. Al salir, dijo que confía en que habrá diálogo en la Administración de Enrique Peña Nieto.

Fuente: Reforma

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