Esta mañana ALT1040 publicó un post acerca de CISPA o la reencarnación de SOPA, noticia que tiene en alerta a todo el internet el día de hoy debido a que además de ser una pésima forma de legislar la comisión de delitos relacionados con datos y el internet — o ridiculamente llamados “ciberdelitos” — comete el gran error de poner todas las papas en el mismo saco: inútiles y juveniles ataques DDoS, con robo de propiedad intelectual y “leaks”, entre otros. EFF alerta y explica bien sus problemas para poder detener esta nueva locura a tiempo.
Algo curioso es que en México el diputado Rodrigo Pérez Alonso, quien pertenece a la bizarra versión mexicana del Partido Verde, promueve una ley con varias características idénticas a las de CISPA, excepto que además castiga con el doble de plenas a funcionarios públicos involucrados en ciberdelitos y también incluye daño al honor de una persona, trata de personas, delitos contra la paz y seguridad de las personas, extorsión, robo de propiedad intelectual y divulgación de información por medios digitales.
Para empezar sería bueno que una ley de este tipo evitará la estupidez de llamar robo a las infracciones la propiedad intelectual. En segundo lugar, las infracciones de propiedad intelectual no tienen nada que hacer aquí. ¿Puede ser que los brillantes lobbystas detrás de esta ley se refieran más bien a secretos industriales o propiedad industrial? Tercero, las infracciones a la propiedad intelectual consideradas un ciberdelito sin especificar ni definir detalladamente que implican, es una medida que simplemente será abusada por las industrias del entretenimiento que aún no obtienen las leyes confeccionadas a su medida en México. El término propiedad intelectual no tiene nada que hacer aquí. Nada.
El dictamen aprobado define un ciberdelito como:
Quien se valga del uso o empleo de medios informáticos para cometer el delito.Algunos de los ciberdelitos son: