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| MEXICO CITY, MEXICO (Image credit: Getty Images via @daylife) |
ricardo.gomez@eluniversal.com.mx
Las remodelaciones que se realizan en oficinas y pasillos de la Cámara de Diputados por el reacomodo de los grupos parlamentarios ante la llegada de una nueva legislatura y la configuración numérica, son solventadas con el gasto discrecional de cada bancada.
A esto hay que sumar que la redistribución de espacios provocó que -por ejemplo- la diputada del Partido Movimiento Ciudadano (PMC), Luisa María Alcalde, trabaje en una pequeña oficina en el cuarto piso del edificio "F". A su lado también despacha su secretaria y gente de apoyo.
La reducción de espacios afectó también a la Coordinación de Guanajuato. La oficina de la diputada del PRI, Guadalupe Velázquez Díaz, se redujo, lo mismo que el espacio donde despacha su secretaria.
En San Lázaro, las remodelaciones por el inicio de la 62 Legislatura ya comenzaron; sin embargo, algunas obras como las que realiza el PRI y PMC se encuentran a medias.
En el tercer piso de los edificios "G" y "F", en los pasillos correspondientes al PRI, se aprecian obras de remodelación sin terminar, a pesar de que ya lleva más de un mes de iniciada la legislatura.
En el segundo piso del edificio "F", zona del PRI y donde se reacomodó a la Coordinación de Campeche, se aprecia la falta de acabados.
De acuerdo con información de la Secretaría General de la Cámara de Diputados y Comunicación Social, no existe un presupuesto específico para remodelaciones y cada grupo desembolsa los recursos que considere pertinentes.
Los montos que utilizará cada fracción para readecuar sus oficinas y espacios físicos forman parte de las llamadas subvenciones, que suelen carecer de controles de transparencia.
Las bancadas reciben cada mes 2.4 millones de pesos como parte de las subvenciones fijas; sin embargo, al final de la pasada legislatura los diputados se autorizaron partidas especiales por 230 millones de pesos como parte del fin de su trabajo.
De enero a abril el PRI reportó gastos por 169 millones 228 mil pesos, de los cuales 104 mil pesos fueron para "bienes muebles e inmuebles". En ese periodo, el PAN gastó 73 millones 441 mil 58 pesos, y el PRD erogó 62 millones 186 mil 23 pesos.
Las remodelaciones se presentan cada cambio de legislatura, a raíz de la nueva distribución de oficinas de los grupos, de acuerdo con las curules obtenidas.
En la pasada elección, el PRI ganó 212 espacios, seguido por el PAN con 114 curules y el PRD con 104 legisladores. Por separado, el PVEM obtuvo 29 diputaciones, por 16 de PMC, 15 del PT y 10 del Panal.
Sin embargo, las tradicionales adecuaciones este año podrían ser más costosas. Y es que legisladores consultados confirmaron que las oficinas de la Mesa Directiva de la Cámara Baja se encuentran en un estado no adecuado para trabajar, por lo que ya pidieron remodelaciones y promovieron la compra de mobiliario nuevo, por lo que este gasto podría elevarse.
Por ejemplo, en las oficinas se encontraron sillas viejas, casi inutilizables, y equipo de cómputo obsoleto, por lo que ya se pidió una renovación.
En las otras oficinas también encontraron mobiliario viejo que de igual forma deberá de ser cambiado por nuevo.
En el edificio "F", en la zona de PMC se carece de computadoras en algunas oficinas, pues los anteriores inquilinos prácticamente "se las llevaron".
La redistribución en San Lázaro ocasionó ya un enfrentamiento entre diputados del PRD y PT. El 20 de septiembre, el petista José Arturo López Candido se sorprendió de que Fernando Zárate, del PRD, le había sacado las cosas de su oficina en el primer piso del edificio "B".
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