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Escrito por Daniel Marmolejo
Lunes, 13 de Agosto de 2012 04:16
Mientras Falsimedia guarda absoluto silencio sobre las irregularidades, López Obrador llama a esperar los resultados oficiales.
Luego del año 68 Televisa le dio una estatura a la mexicanidad: una estatura enana, mediocre. Desde ese conformismo la normalidad es ser subyugados y lo anormal es señalar a los verdugos. La domesticación del pensamiento a través del consumismo, el individualismo y la saturación informativa de verdades a medias (mentiras) prevalece.
México se convirtió en un país neoliberal el cual es víctima de esa derrota civilizatoria en la pos modernidad cultural. En 1988 -veinte años después de la masacre estudiantil perpetrada por el PRI en el gobierno- el PRI se entroniza con un fraude que impone a Carlos Salinas en el poder. Ese personaje oscuro apodado “el innombrable”, hipnótico, delincuente infantil y preparado para acceder al poder conduce a México hacia el Narco-Estado de manera descarada. Magnicidios, desconcierto y crisis fueron los resultados de su gestión. Salinas modificará para mal el destino del país luego de una apertura indiscriminada con el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá.
Hoy, la opinión del mundo hacia México es poco clara para los mexicanos, pero la propensión a la siniestralidad de Felipe Calderón y el PRI en el predominio electoral, y la catastrófica realidad ante un Estado fallido, nos convierten en una divisa humana devaluada, en donde se ha perdido el sentido de la historia y la conciencia humanista.
Por suerte hay un movimiento social que no le concedió el poder al tercer usurpador (en la historia reciente), un monigote tripulado por psicólogos sociales y mercaderes, Enrique Peña Nieto.
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http://www.elprogresista.org/index.php?option=com_content&view=article&id=1264:el-candidato-de-la-izquierda-en-mexico-denuncia-un-fraude-generalizado-en-las-elecciones-presidenciales-&catid=46:editorial&Itemid=27
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