Se han desperdiciado millones de litros de agua por las frecuentes rupturas de ducto
Fuente: Norte
Se han desperdiciado millones de litros de agua por las frecuentes rupturas de ducto
Luis Carlos Ortega | NorteDigital
Técnicos iniciaron una investigación para saber el origen de las constantes rupturas en el ducto de Conejos Médanos, que ha provocado la pérdida de millones de litros de agua potable.
Este vital líquido desperdiciado, representa una cantidad suficiente para dotar del servicio a una familia por espacio de 13.7 años.
De acuerdo a reportes técnicos, el complejo de Conejos Médanos tiene una capacidad de extracción de mil 50 litros de agua por segundo, velocidad a la que se pierde un total de 3 millones 780 mil litros de vital líquido por hora cada vez que se rompe la tubería, lo que significa también la dotación del consumo mensual para 172 familias fronterizas.
Habitantes de la colonia Plutarco Elías Calles, una de las que más ha sufrido por las recurrentes rupturas del acueducto inaugurado en agosto de 2009, coincidieron en señalar que el incidente registrado el pasado martes 26 de junio ocurrió poco antes de las 7:00 de la mañana, lo que significó que el agua corriera por espacio de aproximadamente una hora y diez minutos antes de ser controlada.
“Yo escuché el tronido cuando iban a dar las 7:00 y fue cuando escuché el chirrido que hace el agua cuando viene una crecida del río”, destacó Martín, vecino que habita a tres cuadras del punto de explosión, quien señaló que avisó por celular a los vecinos de la parte baja para que se pusieran a resguardo.
Por su parte Ana Bertha, joven madre de familia de cuatro niños que esa mañana acudió a una consulta en el IMSS, destacó que llegó a su casa al filo de las 8:10 de la mañana, encontrándose todavía con el fuerte caudal de agua que corría desde el punto de confluencia de las calles Taltoyuca e islas Hawaii, “afortunadamente” ubicado en la parte baja de la loma donde se asienta su vivienda.
Esto significaría que la última ruptura generó una pérdida aproximada de cuatro millones 410 mil litros de agua potable, cantidad suficiente para dotar de servicio por espacio de un mes a 191 familias de Ciudad Juárez, o para proporcionar el servicio a una sola familia por espacio de 16 años.
DESCARTAN HIPÓTESIS
La nueva ruptura del acueducto provocó que la mañana de ayer se programara una reunión de emergencia en la capital del estado entre la presidenta del Consejo de Administración de la de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), Nora Yu y el director técnico de la paraestatal, Manuel Herrera Mercado, con representantes de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS), Grupo CARSO y el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).
Esto con el objetivo de hacer una evaluación más detallada de la situación y tomar decisiones inmediatas, dada la recurrencia de las rupturas y explosiones de la línea que han provocado severos daños a la infraestructura y las viviendas de las colonias colindantes con la tubería, y -extraoficialmente- la presunta muerte de un menor de edad.
Al respecto Adriana Gutiérrez, vocera de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS), indicó que el último incidente permitió descartar la hipótesis de que las rupturas y explosiones pudieran deberse a la presencia de bolsas de aire o a variaciones de presión en el interior de la línea.
Indicó que luego de las rupturas del pasado mes de marzo se optó por instalar nueve fusibles hidráulicos en el acueducto a fin de evitar nuevas afectaciones en caso de que la presión interna de los ductos se incrementara.
“Esto se hizo para evitar que se afectara la línea de conducción, pero ahora que ocurrió este nuevo incidente los fusibles resultaron intactos, lo cual descarta definitivamente la hipótesis de las bolsas de aire y el incremento en la presión”, dijo.
Destacó que una vez concluida la reunión de emergencia y descartadas las hipótesis de bolsas de aire y variaciones de presión en el interior del acueducto, ahora la atención se centró en la calidad de los materiales utilizados para la construcción del acueducto, como es el caso de la tubería, bombas, válvulas, tornillería y todos los elementos que componen la infraestructura.
Por ello se procedió a ordenar una investigación basada en el análisis de dichos componentes, cuyos resultados pudieran ser dados a conocer en el lapso de aproximadamente un mes.
Consideró errónea la versión de los habitantes de la zona afectada por el último incidente, al señalar que la paraestatal recibió el reporte de la nueva ruptura a las 7:20 horas del martes, procediéndose en un lapso de 14 minutos al cierre de la válvula ubicada en el cruce de Azcapotzalco y Hong Kong.
Indicó que el desacuerdo con los tiempos en relación con los vecinos, se debe a que aun cuando la válvula se cierra en la parte alta, existe un considerable caudal de agua que sigue fluyendo hacia las partes bajas, provocando en los habitantes la idea de que la fuga continúa.
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