Así, los desafíos del Morena son muchos, porque prácticamente se debe enfrentar a la información sesgada de los medios de masas
No tengo la mínima duda que este país debe cambiar y pronto. El problema es cómo hacerlo. Cuando veo el rostro de tristeza y cansancio de las personas que día a día transitan la ciudad cubriendo sus religiosas ochos horas de trabajo, para apenas recibir un sueldo mínimo; o la destreza de los vendedores ambulantes que los acusamos de haberse convertido en una mafia, pero no observamos con atención las causas que los hicieron tomar las calles para llevar dinero a casa. Y si no se diga de las comunidades indígenas o campesinas, que viven su pobreza con enorme dignidad, que ya quisiera la clase política en un microscópico porcentaje.
El país está jodido porque como ciudadanos no nos hemos organizado. La pavorosa herencia del pri, acostumbró a la sociedad a callar y aguantarse. Porque quien osara levantar la voz, era silenciado con una temeridad atroz; el mejor ejemplo se vivió el 2 de octubre de 1968; hoy por fortuna existen proyectos que están trabajando por reubicar aquella masacre en la memoria del tiempo presente. En fin que hoy quiero dedicar esta entrega al Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) encabezado por Andrés Manuel López Obrador.
No desdeño que la constitución como asociación civil del Morena, que nació y creció producto del fraude electoral del 2006, sea una acción política. Sin embargo, debemos elevar la mira más allá del acto en sí. No sé si ya se dieron cuenta, pero las administraciones panistas (lo digo con ironía) gracias a Dios, ha sido tan torpes que han provocado que los mexicanos nos organicemos en torno a movimientos que responden a nuestras necesidades; ahí tienen el Movimiento por la Paz y Justicia con Dignidad de Javier Sicilia que en su recorrido por el país ha agrupado a familiares y víctimas de la guerra de Calderón y que se ha constituido como una cadena de transmisión que hace que el gobierno (muy a regañadientes) no tenga otro remedio que atender sus reclamos.
Lo mismo pasa con el Morena, Andrés Manuel ha recorrido ciudades, poblados, rancherías, comunidades, lo mismo en la costa que en la sierra, para organizar un movimiento que reclame justicia, bienestar social y vida digna. Lo que hace AMLO (y me consta porque he sido testigo fiel de ello) es darle voz a quienes nunca la han tenido, permite que los mudos de siempre, oprimidos por unos cuantos miserables con poder económico, hablen por primera vez y externen sus dolencias.
Si vieran cómo lo quiere la gente…
En un mitin en San Miguel de Allende, Guanajuato, territorio dicen que panista y de gringos adinerados, los pobladores se acercaron a él y lo veían con una mirada de esperanza y amor, honestamente, yo que me digo observador de las miradas de las personas, nunca había tenido la experiencia de ver ese brillo en los ojos. Andrés Manuel sin guaruras y sin prisa, atendía a cada persona, lo abrazaban, le pedían, le reclamaban… y él a todos les daba voz. De hecho un joven algo borracho comenzó a gritarle: “mesías tropical, mesías tropical”… quienes estaban cerca del joven ebrio intentaron callarlo, pero AMLO se acercó a él diciéndole que con toda confianza se expresara, el muchacho envalentonado por el alcohol, le reclamó su ambición de poder, Andrés Manuel con breves palabras le dio respuesta a las emboscadas del borrachín y este último termino gritando (seguramente con un indefenso sarcasmo): “Es un honor, luchar con Obrador”…
Yo creo que pese a que muchos siguen con la idea de que AMLO es un peligro para México, si se dejarán de pasiones rebasadas y se tomaran la molestia de leer el proyecto de Nación que da origen al movimiento, se darían cuenta que López Obrador no está descubriendo el hilo negro, sólo está exponiendo fundar un gobierno organizado y comprometido con el bienestar social. López Obrador no es un marxista o comunista como lo pintan algunas mentes puritanas. AMLO es simplemente un tipo pragmático e instrumental.
El Morena, tiene el espíritu de atender las necesidades más elementales de todos los ciudadano, ricos y miserables. Porque como bien lo sabe Andrés Manuel, vivimos en una economía de mercado donde conviven la oferta y la demanda; así que no intenta acabar con los ricos, sino que las fortunas se construyan desde el trabajo justo, digno y honesto. El problema es que muchas de las fortunas se han edificado a base de fraudes, corruptelas y saqueos de quienes están al frente de los cargos públicos. En la historia moderna, no hay un solo presidente que no haya robado. No dudo que el actual ande en esos enjuagues.
En fin que siempre he pensado que por razones históricas, México es un país que no tiene la estructura necesaria para despegar. Cada sexenio escucho los mismos discursos de quienes aspiran al poder o de quienes ya lo tienen. Por ejemplo, lo candidatos prometen que “cambiarán” las cosas y los gobernantes en funciones presumen que “nunca como antes” se había hecho tal o cual cosa. El chiste es que los ciudadanos, ante promesas y alardes triunfalistas, seguimos en las mismas o en peores condiciones de vida.
Lo políticos definitivamente ya no nos representan, hace mucho tiempo les hemos perdido la confianza y la credibilidad. Cada fin de año, nos enteramos que el presupuesto enviado por el presidente en turno incrementará algún impuesto o reducirá recursos al bienestar social. Encima de ello, los legisladores por hacerle la mala obra al ejecutivo, le meten mano al presupuesto original y si nos iban a medio joder, los diputados se encargan de jodernos completamente.
Y no olvidemos el cerco informativo de la gran mayoría de medios de comunicación que se han encargado de denostar la actividad política de AMLO. Todos lo tiran de loco, de ambicioso, de expriista, etc., etc., etc., incluso muchos de esos opinadores que en mi modesta opinión no son mas que simple gacetilleros de poca monta, andan diciendo que incluso Marcelo Ebrard sería el mejor representante de la izquierda. Pero por fortuna existe la memoria histórica, los libros, la inteligencia y sabemos quién es quién. Por ello, los merolicos quieren posicionar la idea de que Peña Nieto será el próximo presidente de México, porque con él, perpetuarían sus privilegios y su cómoda forma de vida a costa de la clase trabajadora.
Así, los desafíos del Morena son muchos, porque prácticamente se debe enfrentar a la información sesgada de los medios de masas. Debe resistir los embates de la clase política que tiene copado el poder desde hace décadas. El Morena no es de AMLO, sino de aquellos ciudadanos que queremos un cambio, pero su liderazgo congruente le da un mayor valor. En ese sentido, el trabajo es cuantioso y complejo, porque como lo he dicho en otras entregas, la clase media, esa que ve a los seguidores de López Obrador como mugrosos y revoltosos, está acostumbrada a hacer poco y querer recibir mucho.
Por eso es necesario entender el espíritu del movimiento, no se trata de llevar a AMLO a la presidencia y ya. Sino que debemos establecer un proyecto de Nación que renueve las estructuras medulares que son necesarias para que este país se transforme esté quien esté en la presidencia de la República. El asunto es que la discusión del tema suele ser frívola y poco responsable, ese es otro desafío del Morena, acabar o por lo menos disminuir el valemadrismo de muchos, informarse, leer periódicos serios, cuestionar la información de la televisión y ser más participativos podría ser un buen inicio para revertir todo este desmadre… de lo contrario seguiremos a merced de quienes se sienten dueños del país.
AMLO tiene un gran desafío, abandonar la retórica retorcida de su añejo discurso. Al pan pan y al vino vino. Tiene que presentar su honestidad como mejor imagen. Sus propuestas deben ser solidas y de fácil entendimiento, debe hacer que sus propuestas las entiendan los campesinos, los obreros pero también los millonarios. “Solo el pueblo puede salvar al pueblo” sostiene, esa es una gran tesis que hay que hacer valer. Cuando se le recrimine su pasado priista, debe argumentar que justo fueron las pillerías de los dinosaurios lo que motivó su salida. Debe aceptar entrevistas por quienes lo cuestionan, no lo ha hecho, no quiere entrevistarse con Eduardo Ruiz Healy, con los locutores de fórmula financiera, y otros más; esto da pie para que estos señores se ensañen con él; pero sostengo que AMLO tiene la suficiente solvencia moral e inteligencia para hacerle frente a estos adversarios. Cuando se le diga que solapó a Bejarano, debe sacar las sentencias de los jueces que lo procesaron y lo dejaron en libertad, lo mismo para Ponce que sigue recluido. Sólo así, se podría desenmascarar los mitos estúpidos que se han creado en su contra.
Invito a conocer el proyecto de Nación que dio origen al Morena, el apuntalamiento de la educación, la economía, la distribución de la riqueza, el fortalecimiento de la cultura, la políticas públicas, en resumen, discutamos el proyecto, qué le falta, qué le sobra, pero hagámoslo nosotros, lo de a pie, y debatamos seriamente sin pasiones, sólo con la razón como instrumento del entendimiento… y ojalá que cuando llegue la campaña oficial AMLO tenga una propuesta solida para combatir los ataques del crimen organizado, esa será según mi opinión, la carta fuerte que lo catapultará a la presidencia…
EL CAMBIO ESTA EN TI Y EN MI....EL SENDERO DE VERACRUZ, ROMPIENDO EL CERCO INFORMATIVO.http://elsenderodeveracruz.blogspot.com/
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