‘Ejercían grupos de poder un control casi absoluto’ | Estado | Diario.com.mx
‘Ejercían grupos de poder un control casi absoluto’
Luis Alonso Fierro
El Diario | 18-02-2011 | 23:58
Chihuahua— El sistema policial en Chihuahua actuó de manera improvisada, en muchos casos de forma ilegal, y bajo el mando de grupos de poder que han ejercido un dominio casi absoluto de las instituciones, reveló la ex procuradora de Justicia, Patricia González Rodríguez, en su libro Los Juicios Orales y la Prueba.
A pesar de que la obra tiene un evidente perfil académico, la ex funcionaria detalla a lo largo del texto diversas situaciones a las que se enfrentó el aparato de gobierno encabezado por José Reyes Baeza para implementar el Nuevo Sistema de Justicia Penal en el estado de Chihuahua.
“Forma parte de la cultura policial la existencia de grupos de poder al interior de la institución, que durante muchos años han ejercido un dominio casi completo, ya que a través de un solo mando o unos tres o cuatro mandos como máximo, ejercieron un dominio casi completo, controlaban las principales áreas o cargos. Estos escasos grupos de poder al interior de la policía ministerial han ido perdiendo peso y poder dentro de la actual Agencia Estatal de Investigaciones aunque sus prácticas no han sido del todo erradicadas”, sostiene González, quien es doctora en derecho por la Universidad de Tlaxcala.
El tiraje del libro consta de apenas 100 ejemplares, sin embargo puede consultarse en internet en la página web de la biblioteca virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Autónoma de México, organismo que lo editó en conjunto con el gobierno del Estado de Chihuahua.
La ex titular de la extinta Procuraduría señala que como parte de los diagnósticos que se hicieron al implementar el nuevo sistema penal se detectó que los elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones podían operar sin rendir cuentas y dentro de márgenes muy altos de discrecionalidad.
“Uno de los rasgos distintivos de este anquilosado modelo de policía es que no cuenta con registros confiables. El policía de este modelo teme o desconfía de las huellas o rastros que pueda dejar su firma en registros o actas donde se documente cualquier actuación. La presencia de esas prácticas o vicios ha provocada un alto grado de corrupción policial”.
Para Patricia González para poder garantizar un trabajo profesional de la policía ministerial es necesario que eliminen “tareas genéricas” como la custodia de funcionarios, brindar seguridad a detenidos que estén internados en hospitales, proteger domicilios, tareas administrativas o labores de prevención.
El libro consta de 125 páginas, divididas en siete capítulos, entre los que se hayan: La transición en Chihuahua, de una justicia penal colapsada a un procedimiento acusatorio y adversal; El sistema judicial; El sistema de juicios orales y la producción de pruebas técnica y científicas; y otros.
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