11 de octubre de 2006

LA LLAMADA DE ATENCIÓN CHINA A LATINOAMÉRICA

NOTA ORIGINAL EN INGLÉS DE ASIA TIMES ONLINE

Por José Orozco

CARACAS -Mientras la economía china se expande rápidamente, este poder emergente está agresivamente saliendo en la búsqueda de recursos energéticos y materias primas para mantener su motor económico funcionando. Mientras China mantiene su atención en el enorme mercado estadounidense para sus manufacturas, también se incrementa su interés en materias primas desde el patio trasero del tío Sam, Latinoamérica.

Con muchísima inversión extranjera directa yendo a China y la India, el brillo de la inversión china en Latinoamérica alegró a muchos. China necesita petróleo y materias primas y Latinoamérica las tiene. Parece una pareja hecha en el paraíso comercial. Así como una pareja joven enamorada, China y Latinoamérica se bañaron una a otra con palabras de alabanza, dejando a las partes pensando que nada podría salir mal entre ellas.

Pero ahora ciertas discusiones entre los dos sugiere que la luna de miel ha terminado. Gracias en parte a sus aliados en Latinoamérica China entró en la Organización Mundial de Comercio en 2001 y rápidamente inundó la región con manufacturas baratas. En el principio, pocos latinoamericanos sabían que significaría esto para ellos.

Pero así como China devora cobre chileno, mineral ferroso brasileño, y frijol de soya argentino, las industrias manufactureras en varios países de Latinoamérica empiezan a sentir el dolor.

Los analistas sugieren que esto puede ser una cosa buena a largo plazo. Ahora que la luna de miel terminó, Latinoamérica y China pueden conducir su relación en una forma más realista. Latinoamérica, por su parte, está aprendiendo duras lecciones.

El comercio chino con Latinoamérica ha crecido constantemente en años recientes . El presidente chino Hu Jintao firmó 39 tratados con 5 naciones latinoamericanas cuando las visitó en noviembre de 2004, que subrayó el valor estratégico a largo plazo de esta relación para China y Latinoamérica.

A cambio de materias primas y nuevos mercados, la promesa china de proveer $100,000 millones de dólares en inversiones en la región durante la siguiente década impulsó esperanzas para el desarrollo regional. De 1994 a 2004, el comercio bilateral creció 5 veces, alcanzando un nivel anual de $40,000 millones de dólares.

El acuerdo de libre comercio entre China y Chile, que eventualmente quitará al 97% de los bienes de importación de tarifas arancelarias, entró en vigor el primero de octubre. China eliminará las tarifas de 2,834 productos importados de Chile, incluyendo el cobre. Chile dejará libres de tarifas a 5,891 productos chinos, incluyendo verduras, frutas y equipo mecánico y eléctrico.

Aún antes del tratado, las exportaciones chilenas a China -principalmente minerales, pescado y madera- se incrementaron 42% de 2000 a 2004. Las exportaciones chinas a Chile crecieron 22% en el mismo período. Chile tuvo un superávit comercial con China de $1,900 millones de dólares en 2005.

Junto a Chile, Argentina a recibido una substancial inversión china. En la visita de Hu en 2004, China accedió a invertir un total de $20,000 millones de dólares en Argentina.

Como el poder emergente en Latinoamérica, Brasil ha atraído atención especial de China. Los dos han hecho equipo en pláticas comerciales para demandar mejores términos para los países en desarrollo. En 2004, las exportaciones brasileñas a China totalizaron $5,400 millones de dólares, de $676 millones en 1999. Su superávit comercial con China ese año llegó a $1,400 millones de dólares.

Con esas cifras ¿quién se puede quejar?

"El problema aquí," explica Roger Tissot, director para Latinoamérica de PFC Energy en Washington, "es que China está enviando manufacturas, amenazando las industrias locales."

Bienes no manufacturados, principalmente soya y mineral de hierro, hacen hasta el 60% de las exportaciones brasileñas a China. El presidente Luiz Inacio Lula da Silva y su sueño de aumentar las exportaciones de bienes de tecnología a China no se han cumplido.

El fabricante aeronáutico brasileño Embraer y su asociación para construir jets de ruta corta en Harbin, la capital de la provincia china de Heilongjiang, no ha dado los frutos esperados, y las compañías brasileñas trabajando en la gran presa de Tres Gargantas en la provincia de Hubei son jugadores menores.

Pero al menos Brasil se beneficia de su localización geográfica. Está lo suficientemente alejada de China para hacer el embarque de bienes chinos a Brasil caro, mientras que su distancia de Estados Unidos lo hace menos dependiente que México de la mayor economía mundial.

En el 2004, las exportaciones de México a China llegaron a $1,900 millones de dólares (mdd) mientras las exportaciones chinas a México alcanzaron $9,100 mdd. Los baratos productos chinos han impactado severamente a los manufactureros mexicanos. La participación china de las importaciones estadounidenses es ahora mayor que la de México.

"México no puede competir con los subsidios del gobierno chino y su mano de obra barata", dice Carlos Rovelo, profesor de Negocios Internacionales en el Eastfield College en Dallas y consultor.


El panorama no luce bien. Las multas anti-duping para las importaciones chinas a México desaparecerán en el 2008, dando el tiro de gracia para los productores mexicanos de textiles, juguetes y otros productos más.


Después de montar la ola del TLCAN a firmes niveles de crecimiento (!???????), México tiene que repensar su estrategia en vista de las importaciones baratas de China. Pero estos ajustes se han convertido de rigor en la rápida economía global de hoy. Así que en lugar de representar el colapso económico, la "amenaza China" puede ser la llamada de atención que Latinoamérica necesita.

Para muchos en Latinoamérica, China sigue representando el más grande exponente del "modelo asiático". Siguiendo el ejemplo chino, va el razonamiento, Latinoamérica puede también desarrollarse.

Pero el simple hecho de que se complementan una a otra económicamente demuestra que Latinoamérica no puede imitar a China. Latinoamérica vende recursos naturales, como siempre lo ha hecho, y China los compra y les vende bienes con valor agregado que son más intensivos laboralmente y por lo tanto crea más trabajos.

Con la moneda fortalecida que el boom de bienes de consumo genera, los precios de las manufacturas latinoamericanas se incrementan, haciéndolas menos competitivas. Las fábricas locales cierran, algunas moviéndose a China. El círculo vicioso histórico se repite a sí mismo.

Pero la "amenaza china" puede ser el reto justo para países como México y Brasil necesitan para mantenerse competitivo.

México, por ejemplo, tiene grandes ventajas.

"La clave para crear industrias competitivas recae en trabajadores calificados y bilingües que saben utilizar la tecnología, y México lo tiene", dice Rovelo.

Su proximidad a Estados Unidos, si bien es una queja popular, da a México una ventaja competitiva sobre China y otros países. Bienes embarcados a través del Río Bravo alcanzan sus destinos más rápido que las 3 semanas que necesitan los embarques chinos para llegar a California. "y eso es dinero", dice Rovelo.

No todos los bienes chinos compiten con el mismo éxito. Embarcar juguetes y textiles de China es fácil. Pero embarcar bienes de línea blanca y electrónica o automóviles en un viaje de 3 semanas cuesta mucho más.

"México debe reorganizar su estrategia de exportaciones enfocándose en manufacturar bienes difíciles de embarcar como autos y línea blanca" dice Tissot

La estabilidad económica y política de México (!???????) también atrae a los inversionistas, y un estudio del Banco Mundial lo nombró el mejor de Latinoamérica cuando de hacer negocios se trata.

Para Brasil, el reto es romper el modelo colonial de exportar materias primas y comprar manufacturas produciendo bienes con valor agregado con sus materias primas. Los brasileños pueden mirar a la rica en petróleo Trinidad y Tobago, que ya empezó a producir petroquímicos.

"No hay ninguna contradicción en ir de un exportador de materias primas a una economía industrial de alta tecnología," dice Tissot. "Asia y Australia lo hicieron."

Así que tal vez el modelo asiático, si no China misma, tienen algo que enseñar a Latinoamérica.

COMENTARIO: Aquí resalta que la propaganda del gobierno foxista si ha tenido eco en el extranjero, donde no se sufren los efectos de sus estupideces, para fortuna de ellos, así se explica que hablen de estabilidad política y de los "beneficios" que el TLC ha proporcionado a México. La ventaja geográfica que tiene México con respecto a otros países se ve dramáticamente reducida por 2 factores:
  • los transportistas mexicanos siguen enfrentando barreras para enviar embarques a Estados Unidos
  • la red ferroviaria nacional sigue siendo la misma que dejó Porfirio Díaz y que utilizaron Villa y Obregón en la Revolución Mexicana, que ahora está en buena parte en manos extranjeras.

Para eliminar este problema, es precisamente que una de las más importantes propuestas de López Obrador es que se extienda la red ferroviaria para la carga y el transporte de pasajeros. El transporte ferroviario es la clave del crecimiento económico chino y es lo que permitió la acelerada recuperación de Japón después de su derrota en la Segunda Guerra Mundial.

La deficiente e ineficaz red ferroviaria explica por qué la gran mayoría de las empresas exportadoras se colocan lo más cerca de la frontera norte posible, mientras que en el sur las industrias se colapsan por la invasión de productos extranjeros, afectando primordialmente la industria en el DF y que chapuceramente los panistas atribuyen a López Obrador, como si él fuera el jefe de Estado y definiera la política económica nacional que está arruinando la industria capitalina. Esto también explica por qué en los estados del norte se favoreció al PAN en las pasadas elecciones, han recibido para su fortuna más beneficios de la actual política económica que el resto del país, y por eso no pueden ver las condiciones de desastre y miseria en que se está dejando el sur de nuestra patria. Como mencioné en un comentario anterior, en el norte donde es más caro generar la electricidad es donde resulta que es más barata a los consumidores, y aún así se ha encarecido bastante durante el gobierno foxista.

La absurda idea de que el TLCAN benefició a México se refuta ampliamente con la enorme cantidad de naves industriales abandonadas a lo largo y ancho del país, con el raquítico crecimiento económico de los últimos 2 sexenios que no han logrado compararse ni de lejos a ninguno de los sexenios de la época del "Milagro Mexicano" y en el caso de Fox semeja mucho a la patética administración de de la Madrid. La fórmula de desarrollo que insisten los neoliberales extranjeros y sus cómplices nacionales, no ha servido a ninguna nación. Las economías asiáticas que se despegaron del resto de las naciones en desarrollo lo hicieron combinando una apertura a la inversión extranjera directa, pero dirigida primordialmente a garantizar la transferencia de tecnología, con una adecuada protección a sus industrias locales que no estuvieran listas para enfrentar la competencia extranjera, un sistema educativo eficaz con amplia cobertura, además de una mejor distribución de la riqueza que la que tenemos aquí para incentivar y acrecentar su mercado interno. Estas condiciones permitieron que sus países prosperaran a pesar de que la corrupción gubernamental no es significativamente menor que aquí, con la diferencia que allá se tiene menor tolerancia a la incompetencia. Curiosamente, recuerda más a las políticas que crearon al milagro mexicano de los 50's y 60's que la política actual.

Otro factor que afecta a la competitividad nacional ha sido el manejo desastroso de las industrias energéticas nacionales. Siguiendo el modelo colonial, los gobiernos neoliberales del país transformaron a Pemex en una simple exportadora de petróleo crudo mientras que el país terminaba comprando gasolina a altos precios de Estados Unidos, sin constuir una sola refinería en décadas. Respecto a CFE, la mal administraron lo más posible para arruinar sus finanzas, para que en el sexenio venidero se colapse la compañía y así hacer más aceptable la privatización de la empresa. Con energéticos caros no hay economía que pueda ser competitiva, y en esto tienen mucha vela en el entierro Francisco Labastida y Felipe Calderón, uno por irrelevante y el otro por inútil cuando fueron Secretarios de Energía. Así, la demanda de no privatizar Pemex ni CFE no es sólo una cuestión ideológica, es indispensable si queremos preservar al país y los empleos de millones de personas, demanda que enarbola López Obrador en contra de los verdaderos peligros para México que están en la derecha apátrida y los falsos izquierdistas entreguistas.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

#Dontriananews gracias por escribirnos