Julian Assange (Photo credit: acidpolly) |
En el 2010 el mundo fue sorprendido por la divulgación de una serie de documentos demostrativos de que muchos gobiernos y autoridades dicen una cosa y hacen otra. Les cayó la máscara. Todos vieron que el rey estaba desnudo.
El sitio Wikileaks, monitoreado por el australiano Julián Assange, publicó documentos secretos que dejaron avergonzados a gobiernos y autoridades, sin argumentos para justificar tantos abusos e inmoralidades.
Ya Maquiavelo había afirmado en el siglo 16 que la política tiene al menos dos caras: la que se presenta ante los ojos del público y la que se hace tras las bambalinas del poder.
Bush y Obama admitieron las torturas en Iraq, en Afganistán y en la base naval de Guantánamo, mientras acusaban a Cuba, ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra, de maltratar a los prisioneros.
El Wikileaks no inventó nada. Lo que ha hecho es valerse de fuentes fidedignas para recoger informaciones confidenciales, generalmente acusadoras de gobiernos y autoridades, y divulgarlas. Por eso ese sitio desempeñó un importante papel pedagógico. Ahora las autoridades deben pensarlo dos veces antes de decir o hacer lo que sería causa de vergüenza para ellas en caso de que llegasen a conocimiento del público.
leer mas
http://redaccion.xhglc.com.mx/?p=4093
'via Blog this'
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
#Dontriananews gracias por escribirnos