29 de agosto de 2012

De pobres, oportunistas y cosas peores MAR MORALES @Mar_Morales_

De pobres, oportunistas y cosas peores:




Después del artículo de ayer me llovieron las críticas, me tacharon de indolente y dijeron, algunos, que el PRI ganó porque se aprovechó de los más necesitados. Esto es cierto…. a medias. Dentro de los que iban a formarse por sus 500, 1000, 2000 pesitos, había muchos que los acarreaban y obtenían de ello grandes beneficios. Sí, aunque el adjetivo suene fuerte, casi casi los padroteaban para llevarlos a buscar su dinero o su despensa. Entre unos y otros – los que iban sólo por la lana o el producto y los que lo llevaban—no hay mucha diferencia.



Yo entiendo que el truco del sistema es mantener jodido al pueblo para obtener beneficios en las épocas electorales, pero lo grave de esto es que los que iban por su dinero o por su despensa no eran, en su mayoría, personas en verdad necesitadas. A los que viven en la sierra, en las comunidades alejadas, para variar los ignoraron. A ellos no les llegó. No me digan que los tarahumaras iban a formarse por su tarjeta Monex si no llegan ni a cajeros. El grueso de la transa se hizo en comunidades más o menos “civilzadas” donde tenían acceso a una tienda Soriana, a conseguir sus trucos piramidales (“te doy 10 mil pesos si me consigues 10 personas que me firmen que votarán por el PRI), a quienes les dieron estufas, en fin, no fue en las comunidades dejadas de la mano de dios donde se concretó la compra de votos. A ellos, a los marginados, a los indígenas que no hablan español, hasta para eso los ignoran. Y esto también duele.



Contaré que de primera mano conozco casos en los que, me consta, ni necesidad tienen y ahí andaban viendo la forma de sacar provecho de la elección. Una familia completa, que vive en Neza, andaban las señoras bien felices porque el PRI les iba a dar “su buen billete” por llevarle personas. Con todo el descaro del mundo lo andaban contando de puerta en puerta y lo que decían es que no les importaba quién fuera a ganar mientras a ellas les dieran algo “aunque sea para irla pasando” porque al final de cuentas “todos roban y al menos que me toque algo, ¿no?”. A eso le llamo cinismo y son esos los parásitos que deberían desaparecer porque si no ayudan, que no estorben. Lo que me dio risa es que a algunas se las llevaron al baile y no les pagaron nada. Ah, pero eso sí, andaban bien dignas reclamando que les vieron la cara. Háganme el favor. ¡Todavía se enojan! A ese tipo de personas sí deberían castigarlas y quitarles su derecho a votar en las próximas elecciones, porque sólo las ven como negocio y les importa un carajo a quien se lleven entre las patas.

De ese tipo había muchas, en verdad muchas personas, que teniendo el modo de ganarse la vida, prefieren ver a quién transan para seguir amolando al prójimo. Y de ellos fue de quien sacó el PRI mayor provecho porque están maleados, amañados y tienen la suerte de conseguirse incautos que les siguen la corriente, algunos sí, por necesidad, otros más, igual que ellos, por purito gusto.

En suma, y volviendo a la pregunta que hice ayer : ¿Enrique Peña Nieto fue en verdad una imposición? Sigo pensando que no lo fue tanto, pero sí cayó en blandito en un país donde no estamos acostumbrados a querer mejorar, sólo nos preocupa que alguien nos saque de la bronca, aunque sea sólo por unos días, y nos importa un cacahuate que existan millones de personas que sí tienen deseos de hacer bien las cosas y de hacer que en México todo cambie. Qué cosas….


@Mar_Morales_




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