Para los poblanos las encuestas tienen un valor distinto al que le atribuyen los actores políticos nacionales y al que tanto pavonean con trompeta y platillos los que así se consideran líderes de opinión.
El domingo 4 de julio de 2010 Puebla salió a las calles y ejerció su verdadero sentir sobre aquellos que contendieron en ese proceso y figuraron como los dos favoritos: Javier López Zavala (candidato oficial de Mario Marín) y Rafael Moreno Valle (candidato de la coalición PAN-PRD-PANAL-Convergencia). Los resultados de dicha elección electoral fueron escandalosamente distintos a lo que las encuestas y particularmente Mitofsky venían marcando.
Rafael Moreno Valle, hasta la última encuesta que se revisó, jamás alcanzó al candidato de Mario Marín. Por el contrario. Consulta Mitofsky a dos semanas de la elección (encuesta realizada del 16 al 21 de junio) le dio a Javier López Zavala del PRI una ventaja de más de 13 puntos sobre Moreno Valle de la coalición Compromiso por Puebla.
El diario Reforma en su propia encuesta y a dos semanas de las elecciones colocó a López Zavala con 7 puntos de ventaja sobre Moreno Valle.
Indicadores SC representado en su momento por Elías Aguilar ubicó al priista Javier López Zavala en primer lugar con el 45.5% de las intenciones de voto, dejando a Moreno Valle a una distancia de 11 puntos con el 33.7% ¡11 puntos!
¿Qué pasó? El domingo 4 de julio en Puebla las urnas callaron de manera agresiva a las encuestas y a sus encuestadores: Rafael Moreno Valle que se mantuvo y llegó al desenlace del proceso electoral con 13 puntos de desventaja según Mitofsky, ganó las elecciones. Triunfó sobre el candidato del PRI con prácticamente los puntos que en toda encuesta lo ubicaron en segundo lugar. Moreno Valle desbancó al PRI con más de 10 puntos de ventaja llevándose además la mayoría en el Congreso.
Y yo me pregunto: Qué dicen a todo esto los encuestadores y los propios medios ¿Margen de error? Lo que callan quizá por intereses corporativos, de poder o por el mero “showbusiness”, es el factor llamado Taza de Rechazo. “Para la mayor parte de las encuestas esta cifra es sumamente elevada. Para Mitofsky, por ejemplo, es de 60%”: John Ackerman (Revista Proceso. Mayo 2012).
La Taza de Rechazo explica el Dr. Ackerman Rose investigador de la UNAM, indica claramente que 6 de cada 10 visitados no se encuentran en sus casas o se rehúsan a contestar. De allí (todavía falta) el 25% de los que participan con su respuesta no comparten su preferencia electoral, por tanto, “los encuestadores solamente alcanzan a captar la intención de 3 de cada 10 viviendas visitadas”. Pero Ackerman no se conforma con la matemática pura y da estocada a las encuestas con esta precisión cualitativa: “Y este grupo minoritario es sesgado de origen porque se encuentra conformado exclusivamente por personas a quienes les parece conveniente publicitar su preferencia electoral” (Revista Proceso. Mayo 2012).
Quizá por este “detalle” Mitofsky le dio a Javier López Zavala 13 puntos de ventaja sobre Moreno Valle. Y Moreno Valle le ganó a López Zavala con más de 10 puntos porcentuales.
Más datos...
En el 2000 Mitofsky cerró sus encuestas con un Francisco Labastida del PRI superior a Fox por 7 puntos: Labastida 46% Fox 39%.
En el 2006 Mitofsky cerró sus encuestas dejando a Felipe Calderón con 7 puntos menos que Andrés Manuel: AMLO 38% Calderón 31%.
Nota en el refri: Apaga la televisión.
Ave, más no pájaro nalgón: @FApulido
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