Cristy Sada Salinas quiere llegar al Senado de mano de AMLO

Cristy Sada Salinas quiere llegar al Senado de mano de AMLO - 2012 - ADNPolítico.com:

Por Óscar Balderas  @oscarbalmen


Mayo 10, 20121 Comentario
Su voz es completamente sampetrina, como se le llama a la gente que vive en el lujoso municipio de San Pedro Garza García, en Nuevo León. Tiene esa entonación de “chica fresa”, propia de quienes acostumbran a comprar y viajar a todo lujo.
Por eso, los más duros seguidores de Andrés Manuel López Obrador, el candidato presidencial de las izquierdas, la escucharon con desconfianza en el mitin de aquel 22 de abril.

Escudriñaron su cabello rubio, su mascada de seda, sus lentes de diseñador y la ropa blanquísima que usó sobre el templete instalado en una atiborrada Macroplaza. Se ubicó en la primera fila de invitados, justo atrás del tabasqueño, por lo que las miradas cayeron fácilmente en ella. De inmediato, alguien la identificó: era Cristina Sada Salinas, la “princesa de San Pedro”, presentada esa tarde como candidata al Senado por Nuevo León por los tres partidos de izquierda.



Cristina – o “Cristy” – es bien conocida en la sociedad regia, sobre todo en los más altos círculos sociales: su abuelo, Benjamín Salinas, fundó el emporio Salinas y Rocha; su padre, Roberto Sada fue el accionista más importante de Grupo Vitro; su madre, Irma Salinas, fue una escritora liberal que denunció la hipocresía de la alta sociedad nuevoleonesa; y su primo, Ricardo Salinas, es presidente de Grupo Salinas, que cuenta entre sus negocios con Televisión Azteca.

Con ese linaje de familias prominentes, Cristina Sada ha tenido una vida privilegiada: estudió en las mejores universidades del extranjero, viajó por el mundo, la fotografiaron hasta el cansancio en lujosos eventos sociales, e incrementó su fortuna gracias a su exitosa cadena de colegios privados.

A sus 62 años, esta empresaria pensó que pasaría el resto de su vida como altruista “socialité”... hasta que en febrero pasado se cruzó en su camino Manuel Camacho Solís, coordinador del Diálogo por la reconstrucción de México (Dia), quien le pidió debutar en la política.

“Cristy” ni siquiera sabía que existía un partido llamado Movimiento Ciudadano, hasta que Camacho le pidió ser candidata a diputada federal por ese partido, el PT y el PRD en el distrito electoral de San Pedro Garza. El ofrecimiento cayó como un balde de agua helada en su círculo social, que hace seis años veía en López Obrador y la izquierda un enemigo a vencer.

“Me pusieron en una mesa todo el menú para que yo eligiera lo que quisiera ¡a ese grado les interesaba que yo me involucrara! En un principio fui tímida y sólo acepté ser diputada federal. Luego me insistieron que lo que quisiera y opté por el Senado.

“¿Qué me orilló? Me orilló el cinismo terrible de las autoridades estatales y nacionales. Ya no te la puedes pasar bien. Al menos, yo no me la puedo pasar bien, no puedo disfrutar lo que trabajé tantos años por culpa de este cinismo, este descaro, esta irresponsabilidad”, contó a ADNPolítico.com.

Así que dejó la comodidad de la casona en la que vive y actualmente se dedica a conquistar a las clases bajas. Su campaña, dijo, es a ras de tierra, con tenis en lugar de tacones, y pidiendo el voto del los campesinos, obreros, taxistas, estudiantes y profesionistas acosados por la pobreza y el crimen en Nuevo León.

“Yo debí de haberme levantado antes y debí de haberme dado cuenta que el pueblo de Nuevo León debía la participación de todos, incluida la mía”, lamentó “Cristy, la regia”, como le dicen de cariño sus conocidos, en alusión a la caricatura “Cindy, la regia”, un estereotipo de “niña bien” de San Pedro Garza.

A López Obrador, Cristina Sada lo calificó de “extremadamente congruente”, “amante de su país” y “conocedor profundo de las tradiciones mexicanas”, una postura que busca infiltrar en la conservadora élite sampetrina.

“No se imaginaban que Cristina Sada Salinas pudiera hacer un gran papel como candidata al Senado. Están sorprendidos y se sienten muy orgullosos de lo que estoy haciendo y las felicitaciones me comienzan a llegar, incluso de los círculos del nivel en el que yo siempre me he desenvuelto”, señaló.

Ahora, el reto para “la princesa de San Pedro” es coronarse en una curul por la izquierda, en menos de ocho semanas, y arrebatársela al PAN y al PRI.



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