El precandidato de las izquierdas a la Presidencia de la República Andrés Manuel López Obrador se reunió en Hidalgo con alrededor de tres mil jóvenes de 16 estados del país. Se comprometió a garantizar la libertad de manifestación, sin represión, además de empleo y becas.
Con los jóvenes dijo "voy hacer tres compromisos", que haya libertad de expresión, empleo y becas.
Las fuentes de trabajo indicó, se lograrán si el país tiene un crecimiento de al menos 6%, con ello se pondrán en marcha un millón 200 mil empleos que se requieren. De la agenda presentada por el sector juvenil, dijo que uno de los temas más polémicos es el aborto.
En ese caso se pronunció por una consulta en ningún caso la imposición, reiteró.
El aspirante se comprometió, a que en los primeros seis meses de su gobierno siete millones de jóvenes tendrán empleo, ya que apuntó, si el país tiene un crecimiento de 7% se podrán crear un millón 200 mil empleos, ya que actualmente 700 mil jóvenes sólo tienen la opción de migrar, insertarse en la economía informal o la delincuencia.
Resaltó la necesidad de que México tenga al menos durante dos años un programa emergente de trabajo para jóvenes. A los jóvenes, subrayó, se les ha negado durante años toda oportunidad.
Hizo énfasis en que en las universidades se acabarán los rechazados, ni en la UNAM, ni en ningún universidad pública habrá rechazados. El aspirante a la presidencia también habló sobre el caso Ayotzinapan y apuntó, "mi repudio a la represión y en este caso la represión a los estudiantes de Guerrero, nunca más la represión".
Reiteró la necesidad de acabar con la burocracia y los privilegios de la alta burocracia, ya que calificó como "ofensivo" que los políticos de la alta burocracia tengan salarios de hasta 600 mil pesos.
Aseguró que al igual que el presidente Benito Juárez, estará enfocado en "nada por la fuerza, todo por la razón". Apuntó que se buscarán acuerdos para todos los sectores, ya que consideró que mientras México tenga la enorme brecha de la desigualdad, seguirán los sentimientos de odio y frustración, así como la inseguridad.
López Obrador lamentó que a la violencia que impera en el país se le haya tratado de combatir con más violencia y dijo "yo no sé en qué cabeza cabe", el tabasqueño se comprometió a serenar el país, a través de la educación y las oportunidades para los jóvenes.
Para el país señaló es necesario "honestidad, justicia y mucho amor", acotó.
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