El 12 de diciembre dos estudiantes fallecieron durante un desalojo violento por parte de autoridades de los tres niveles de Gobierno.
Plascencia señaló que los agentes que participaron en el desalojo violento omitieron brindar atención a los heridos por arma de fuego
Daniela Rea
Ciudad de México (9 enero 2012).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) señaló que agentes de la Policía Federal, Ministerial y Preventiva, servidores públicos y los responsables de su coordinación propiciaron el enfrentamiento con normalistas de Ayotzinapa así como la muerte de dos manifestantes.
"Los servidores públicos que participaron en los hechos, y los responsables de su coordinación, omitieron actuar con eficiencia en el desempeño de su cargo y cumplir con la debida diligencia el servicio de seguridad pública que les fue encomendado al propiciar un enfrentamiento en la vía pública pusieron en peligro vidas humanas y generaron la muerte de dos manifestantes y heridas por proyectil de arma de fuego en cuatro más", señaló el Ombudsman Raúl Plascencia.
Al dar a conocer un informe preliminar de las investigaciones por el desalojo violento ocurrido el 12 de diciembre en la Autopista del Sol, la CNDH indicó que, al ser una manifestación pública y en la que los participantes no portaban armas de fuego, hubo uso indebido de las armas por parte de los elementos policiacos.
En conferencia, Plascencia señaló que la SSP federal y el Gobierno de Guerrero vulneraron diversas garantías durante el violento desalojo ocurrido el 12 de diciembre.
"Se observaron violaciones graves a derechos a la vida, a la seguridad e integridad personal, a la libertad, al trato digno, a la seguridad jurídica y a la legalidad, atribuibles a servidores públicos de la Secretaría de Seguridad Pública federal y del Gobierno del Estado de Guerrero, derivado de los acontecimientos tanto a cargo de aquellos que intervinieron directamente, como de aquellos que ordenaron o toleraron dichas acciones u omisiones", mencionó.
Según el informe, el enfrentamiento entre autoridades y estudiantes se desencadenó al estallar una granada de gas lacrimógeno a los estudiantes.
Lo que no se ha podido determinar sobre los hechos es qué corporación de seguridad fue la primera en detonar las armas de fuego, señaló el Ombusdman nacional.
También se informó que la CNDH no pudo determinar cuáles fueron las balas que mataron a los dos estudiantes e hirieron a otros cuatro, pues las ojivas no han sido encontradas porque atravesaron los cuerpos.
Sin embargo, en el informe preliminar se detalla que las balas que mataron a los estudiantes salieron de la dirección donde estaban los policías estatales y ministeriales.
"Por la trayectoria de los disparos, que vinieron muy probablemente de poniente a oriente, desde donde estaban los servidores públicos de Guerrero, de la Policía ministerial y estatal", aseguró Plascencia.
Agregó que las evidencias en el lugar de los hechos fueron alteradas por los mismos agentes involucrados en el enfrentamiento, y que, según la indagatoria, se registró que en el lugar hubo 165 elementos desplegados, 67 de los cuales portaban armas de fuego.
A casi un mes de los hechos, la CNDH señaló que los servidores públicos de los tres órdenes de Gobierno omitieron actuar con eficiencia y cumplir con las debidas diligencias.
Señaló que tras el enfrentamiento, 24 personas fueron detenidas arbitrariamente por agentes policiacos, 14 de las cuales fueron sometidas a un trato indigno y uno de ellos a torturas.
Plascencia consideró que los agentes que participaron en el desalojo violento omitieron brindar atención a los heridos por arma de fuego.
Por otra parte, destacó que turnará a la PGR una copia del informe para que se efectúe el deslinde de responsabilidades correspondiente.
#AMLO2012
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