Asesinato a sangre fría y paramilitares en Chilpancingo: las fotos de la vergüenza | Pulso Ciudadano

Asesinato a sangre fría y paramilitares en Chilpancingo: las fotos de la vergüenza | Pulso Ciudadano:

Una reciente secuencia de fotos, cortesía de Reforma en Twitter, demuestran ampliamente y sin paliativos, quehubo paramilitares o policías de paisano disparando contra los manifestantes y que uno de los estudiantes asesinados murió como consecuencia de disparos efectuados por elementos policiales sin medir provocación alguna. Hablamos, pues, de un asesinato a sangre fría cuando éste caminaba por la autopista. Igualmente se ha confirmado que el fotógrafo Erick Escobedo fue detenidos y torturado por elementos policiales.

Jorge Alexis Herrera Pino originario de Atoyac y a Gabriel Echeverría de Jesús de Atlixtlac, ambos estudiantes de la Normal, son las víctimas de la brutalidad policial.

Algo demasiado grave¿. Se trata de una verdadera encerrona para matar estudiantes. Esto es lo que hoy sucedió en Chilpancingo y no se trata sólo que la Segob diga que va a investigar sino que cada uno de nosotros, periodistas, ciudadanos, partidos y organizaciones de derechos humanos, forcemos la máxima transparencia para que hechos como estos no sucedan otra vez.

De momento, el horror sólo aumenta. El procurador de Guerrero, Alberto López Rosas se sacó de la manga una preciosa teoría conspirativa. Lean y rían. Si pueden:

La movilización pudo haber sido preparada por un grupo ajeno a la Normal que tejió una trampa para las autoridades y así inculparlas de actos represivos.

Y luego confirmó la detención de un joven de 19 años a quien acusan de haber iniciado el tiroteo donde perdieron la vida los dos estudiantes de la Normal de Ayotzinapa. De acuerdo a la reciente rueda de prensa de funcionarios del gobierno estatal, al principio sólo estaban policías federales y estudiantes normalistas, pero tras 20 minutos de intercambio de disparos se logró detener a Gerardo Santiago Peña, de 19 años de edad, originario de Acapulco, quien al momento de su detención tenía en su poder un cargador de un rifle AK47 y posteriormente condujo a la policía al lugar donde había escondido el arma.

Las fotos cuentan otra historia. O la vieja historia de siempre. Paramilitares y uniformados trabajando juntos para asesinar estudianrtes indefensos.

Empieza la ocultación y el simulacro. Empieza también la lucha por la verdad:

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