Algunas reflexiones en torno de la visita del Licenciado Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a Ciudad Delicias, Chihuahua

Algunas reflexiones en torno de la visita del Licenciado Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a Ciudad Delicias, Chihuahua Reportaje Viernes 16 de septiembre de 2011. Llegué a las 4 de la tarde al punto de partida: oficinas del Movimiento de Regeneración Nacional (morena) en la ciudad de Chihuahua. Me invitaron a abordar uno de los dos autobuses con destino a Delicias. En ese momento, sólo había 10 personas y yo. Después de una espera de 30 minutos, subió otra pasajera, y el autobús partió hacia su destino; y yo, no pude evitar el pensamiento de que tanto AMLO como el morena tenían poca capacidad de convocatoria en esta ciudad capital. Antes de salir a la carretera, el conductor del autobús recogió otras 12 personas; y ya éramos 24 los(as) viajantes. Alguien comentó que en el otro autobús viajaban 40 personas. La mayoría de los(as) pasajeros(as) eran mujeres, todas y todos de tez morena, y tanto su piel como su pelo se veían maltratados. Su ropa y su calzado se veían muy usados y de mala calidad. Armando, el coordinador de morena que viajaba en “mi” autobús, es un sexagenario de aspecto verdaderamente humilde tanto en lo económico como en lo espiritual. Desde la perspectiva espiritual cristiana podría catalogársele como un auténtico Cristiano. Todo el tiempo, con su voz baja y dulce se mostró amable, educado y atento a los requerimientos de todos y cada uno de los que decidieron ir a recibir a AMLO a Delicias. A las 18:15 horas llegamos a Delicias. La pequeña Plaza del Santuario, lugar a donde arribaría AMLO estaba pletórica de gente (tal vez unas 700 personas) con banderas del morena que ondeaban sin cesar. Un bien aspectado adulto, fungió como maestro de ceremonias y anunció la participación en este evento del pequeño Ballet Folklórico de Jiménez. El ballet ejecutó varios alegres y vistosos bailes regionales. Uno de ellos Las alazanas. Como segundo número se presentó la profesora y cantante Mercedes López Acosta y su guitarrista. Su humilde vestido lucía el verde, el blanco y el rojo de nuestra Enseña Patria. Ella habló de la pobreza y de la injusticia que cada día crecen más y más en nuestro país, entonó varias canciones, entre ellas la bella melodía: ¿Qué le han hecho a mi país?: Raquel Lozoya declamó: Hidalgo, de Manuel Acuña Sonaron las campanas de Dolores Voz de alarma que el cielo estremecía, Y en medio de la noche surgió el día De augusta Libertad con los fulgores. Temblaron de pavor los opresores E Hidalgo audaz al porvenir veía, Y la patria, la patria que gemía, Vio sus espinas convertirse en flores. ¡Benditos los recuerdos venerados De aquellos que cifraron sus desvelos En morir por sellar la independencia; Aquellos que vencidos, no humillados, Encontraron el paso hasta los cielos Teniendo por camino su conciencia! Un jovencito de Jiménez, explicó que era miembro activo de morena, y entonó (¿desentonó?) el Corrido de Chihuahua, la gente, generosa, en coro, le corregía la plana, cada vez que él se desafinaba. Un adulto joven, se presentó como amigo de AMLO, se auto designó como un producto de la cultura del esfuerzo y criticó duramente la cultura del privilegio de los poderosos. Él interpretó la canción: Solamente una vez: Cosme Quiñones, al grito de “¡Qué viva nuestro líder nacional: AMLO!”, y después de pedir un gran aplauso para la gente de morena y su líder, entre otras canciones, interpretó: Collar de Perlas: Bajo un cobertizo, un pequeño grupo de tarahumaras vendía artesanías; los niños, descalzos y desnutridos, presagiaban un triste futuro: el de los NINIS: los que no reciben Ni oportunidades de estudio, Ni oportunidades de trabajo digno y bien pagado. La plaza estaba repleta, el escenario también: de niños, de adultos jóvenes, de adultos maduros y de adultos mayores. Pocas, poquísimas personas parecían de clase media, la inmensa mayoría era gente pobre, en lo económico; pero con un corazón de oro. Gente con conciencia social y política, y con una ideología progresista. No pude evitar recordar aquellas palabras que profieren los racistas, que desgraciadamente todavía existen en nuestras tierras. Esas palabras hirientes y ofensivas que tachan de “nacos” (indios) y de “nacas” (indias) a todos(as) aquellos(as) que, con fidelidad (Fe) y lealtad apoyan y empujan a su líder: Andrés Manuel López Obrador. Esos racistas ya quisieran tener un poco de la elevada calidad y estatura ética, moral y humana de esos “nacos” y de esas “nacas”. A las 19:40 horas el cielo ya estaba encapotado, y AMLO no llegaba. El viento arreció y las primeras gotas de lluvia empezaron a caer. El maestro de ceremonias arengaba a la gente, diciendo con voz enérgica y decidida: ¡Luchemos por nuestros pueblos, por nuestras ciudades, por nuestro país: Salvemos a México! A las 19:50 horas llegó AMLO; la gente entusiasmada gritaba ¡AMLO, AMLO, AMLO! ¡Es un honor, estar con Obrador; es un honor, estar con Obrador; es un honor, estar con Obrador! Yo no pude evitar modificar la consigna, con mi pensamiento: ¡Es un honor, estar con esta gente, de López Obrador; es un honor, estar con esta gente, de López Obrador; es un honor, estar con esta gente, de López Obrador! Cuando inició su discurso AMLO, San Pedro se apiadó de nosotros, disminuyó la lluvia, casi la ahuyentó. AMLO empezó a hablar de las riquezas materiales de Chihuahua y de sus saqueadores (nacionales y extranjeros); de la grandeza del pueblo chihuahuense; pero en ese momento, San Pedro decidió no interferir más las fuerzas de la naturaleza; y el chubasco no se hizo esperar; la mitad de los asistentes corrieron a guarecerse de la lluvia, la otra mitad, estoicamente, se quedó en medio de la plaza, soportando, con alegría, la intensa lluvia. AMLO, con prudencia y benevolencia invitó a las personas a dar por terminado el evento, diciendo: Así como ustedes soportan con entereza el aguacero, millones de mexicanos luchan con entereza contra el mal gobierno; y terminó su alocución con una pregunta: ¡Compañeros y compañeras! ¿Están dispuestos a seguir luchando para salvar al país? Toda la gente, respondió (yo, incluido): ¡Sí! Bajo la lluvia, dos maestros de ceremonias dirigieron el Himno Nacional Mexicano, la gente cantó con fervor patriótico. El evento terminó al ritmo de morena, canción que la gente, empapada, cantaba y bailaba con soberana y singular alegría. Reportó: Ángel Ortiz Tovar. -- Rocsanros. Visita la página de MORENA de Chihuahua http://casaenchihuahua.blogspot.com ¡AMLO 2012! PARTICIPA Y DÉJANOS UN COMENTARIO