Se está ejecutando un fraude en segunda vuelta de elecciones presidenciales en Perú
MAYO 5, 2011
por Carlos A Quiroz
Vienen días muy difíciles para Perú, a vísperas de las elecciones presidenciales más trascendentales de nuestra historia.
Los grupos de poder que hoy controlan la política, economía y cultura de Perú, están haciendo todo lo posible para aferrarse al poder político y continuar el actual modelo de explotación y saqueo neoliberal. Es posible que explote un conflicto social en Perú.
La lucha por el Ejecutivo en Perú es intensa. Los corruptos grupos que se han unido detrás de la candidatura de la corrupta Keiko Fujimori, saben que ella no tiene opciones de ganar las elecciones, a menos que haya un fraude.
Por eso, el objetivo de estos grupos es robarle el triunfo al líder de oposición Ollanta Humala, a como dé lugar, igual como lo hicieron en 2006. Este fraude electoral que ya está siendo ejecutado, en nuestras narices.
Las actuales elecciones presidenciales ya han sido comprometidas.
En Perú, la democracia está secuestrada por la corrupción de grupos de poder, verdaderas mafias de sicarios, asesinos, narcotraficantes e infiltrados de países imperialistas. Estos grupos controlan los medios de comunicación peruanos, casi completamente. La mayoría de los medios peruanos están en Lima.
Los grupos de poder han tomado control de los medios de comunicación en todos sus niveles, y de otros agentes de influencia en la opinión, como las encuestadoras. En realidad, estas siempre tuvieron el control de estas, pero hoy es obvio, descaradamente obvio.
Con excepción del diario La Primera, parte del diario La República, las redes sociales de internet y algunas radios, casi todos los medios de prensa están realizando una guerra sucia de difamación en contra de Ollanta Humala, y propaganda a favor de Keiko Fujimori. Todos los canales de TV lo hacen, la gran mayoría de radios también.
Mientras tanto una media docena de periodistas en Lima, Amazonas y Arequipa, ha sido despedidos por no apoyar el fujimorismo.
En cualquier país del mundo, este tipo de manipulación mediática es considerada una señal de fraude. El proceso electoral ya ha sido corrompido y está en peligro. Pero no en Perú. Al contrario, se acusa a Ollanta Humala de ser un peligro para la prensa. Para esto se utiliza al auto-nombrado defensor de la libertad de prensa, el Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS) que mantiene un silencio completo sobre esta manipulación. El IPYS es financiado desde EE.UU.
El nivel de corrupción electoral en Perú llega al nivel de descaro. Hay incluso, campañas dirigidas por familias adineradas, para comprar la voluntad electoral de los pobres con donaciones de víveres, ropa y dinero. He hecho la denuncia en este blog, pero ningún medio de comunicación de Perú ha investigado la denuncia.
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