Espiral de violencia en Ciudad Juárez: preguntas y respuestas
16/07/2010 | Ioan Grillo | GlobalPost
Si Dante hubiese ido alguna vez a Ciudad Juárez, la habría situado directamente en el séptimo círculo del infierno, el que contiene a los violentos y está rodeado por un río de sangre. La ciudad mexicana, bañada por el río Grande, es la capital mundial de los asesinatos, con más de 5.500 muertes contabilizadas desde enero de 2008.
(Ciudad Juárez, México). En Juárez han tenido lugar una quinta parte de los más de 25.000 asesinatos relacionados con drogas que se han producido en México desde 2006, cuando el presidente Felipe Calderón declaró oficialmente la guerra contra los fuertemente armados cárteles de la droga del país.
Esa guerra alcanzó una nueva dimensión cuando el mes pasado el candidato favorito a gobernador de un estado fronterizo fue asesinado por unos pistoleros, probablemente enviados por un cártel de la droga.
En ninguna otra parte la violencia es tan horrible como en Ciudad Juárez, donde 13 adolescentes fueron asesinados en una fiesta y donde tirotearon a 17 drogadictos que se recuperaban en un centro de rehabilitación.
Pero en medio de todas las noticias que ponen el foco sobre esta carnicería, los hechos concretos sobre quién está luchando, quién está muriendo y por qué razón, siguen siendo confusos para muchos observadores. Ésta es una panorámica general del conflicto.
¿Es Ciudad Juárez realmente la ciudad con más crímenes en el mundo?
Muchas fuentes, incluido el FBI y varias organizaciones no gubernamentales, dicen que sí lo es. En 2009 Juárez registró 191 homicidios por cada 100.000 habitantes, según el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública de México. Tras ella figura San Pedro Sula, en Honduras, con 119 asesinatos.
Nueva Orleans, la ciudad con más homicidios del vecino EEUU, tuvo un promedio de 69 muertos al día, lo que la sitúa en octavo lugar del ranking. EEUU en su conjunto tiene un índice anual de asesinatos de 5 por 100.000. Por supuesto, muchos homicidios tanto en Juárez como en otros muchos lugares del mundo, nunca son denunciados.
¿Quiénes son los que luchan en Juárez?
Tanto las autoridades mexicanas como las de EEUU dicen que el conflicto estalló en enero de 2008, cuando el cártel de Sinaloa, liderado por Joaquín “Chapo” Guzmán, le declaró la guerra a sus viejos socios del cártel de Juárez, liderado por Vicente Carrillo Fuentes, por hacerse con el control de la ciudad.
Para entablar la lucha, los de Juárez reclutaron a una banda callejera y carcelaria llamada Barrio Azteca, mientras que los de Sinaloa se aliaron con la pandilla rival, los Artistas Asesinos o Doble A. El alineamiento de estos miles de pandilleros, respaldados con dinero y armas traídas de contrabando desde EEUU, ha contribuido a la escalada de la violencia.
¿Por qué luchan los cárteles?
El principal botín es Juárez y su posición para introducir drogas de contrabando en EEUU. Localizada en el centro de la frontera de 3.200 kilómetros entre México y EEUU, Juárez es desde hace tiempo un tesoro estratégico para mover cocaína, heroína, marihuana y metanfetaminas hacia el norte.
Las mafias que controlan esta plaza no solo pueden mover su droga, sino grabar con impuestos de hasta el 20 por ciento a los otros traficantes que quieren transportar mercancías por ese corredor. Además, Juárez ofrece como botín el control de dos puentes internacionales y una importante franja de desierto. El control de la ciudad vale miles de millones de dólares.
¿Se quedan muchas de esas drogas en México?
Con las drogas atravesando la ciudad y muchos emigrantes que regresan a su país desde EE UU con problemas de adicción, Juárez se ha convertido en un importante mercado local de drogas, especialmente de cocaína y heroína. La ciudad tiene ahora miles de narcotienditas. Cada uno de estos pequeños locales supuestamente gana miles de dólares al día.
La lucha por controlar las esquinas de las calles también ha servido para aumentar aún más el nivel de violencia. Muchos de los muertos en la ciudad son pequeños traficantes que supuestamente no habían pagado al cártel correspondiente el “impuesto” para vender drogas.
¿Quién está secuestrando y extorsionando?
Desde que el conflicto estalló en 2008, en Ciudad Juárez ha habido cientos de secuestros y también muchos grupos exigen a los negocios dinero a cambio de protección. Las personas que no pagan los rescates o las extorsiones son muchas veces asesinadas de manera brutal y muchos negocios acaban siendo quemados.
La extorsión es el principal problema del sector empresarial de la ciudad. Sin embargo, no está muy claro quién está detrás de todo ello. Los cárteles podrían estar implicados, pero algunos agentes aseguran que los señores de la droga no se ensuciarían las manos por cifras que pueden ser de 150 euros al mes.
También los pandilleros o matones vinculados a las mafias podrían estar sacando un dinero extra con estas prácticas.
En 2008, el Gobierno municipal despidió a 600 policías corruptos. Algunas personas dicen que ellos son quienes están detrás de las redes de extorsión. Otros dicen que se trata de criminales oportunistas con ninguna conexión con los cárteles y que sólo aprovechan el violento caos reinante para hacer dinero rápido.
¿Cuántas muertes están vinculadas a la guerra de los cárteles?
Es imposible decir cuántos asesinatos en Juárez están relacionados realmente con la lucha por el control del tráfico de drogas. La gran mayoría de los homicidios nunca se resuelven, e incluso cuando hay detenciones (incluidos algunos sicarios acusados de cientos de muertes) la única prueba que existe es una confesión obtenida bajo tortura. Los miembros de los cárteles también matan a muchas víctimas por disputas personales, incluidos problemas de amor o cuestiones de honor.
Con la impunidad reinante, es fácil que quienes tengan problemas en Juárez piensen que pueden matar sin problema. No obstante, la mayor parte de las muertes llevan el sello de las mafias, como el uso de rifles automáticos y la realización de emboscadas con varios vehículos.
¿Por qué la Policía y el Ejército mexicanos no han sido capaces de acabar con la violencia?
El Gobierno mexicano ha desplegado hasta 10.000 efectivos en la ciudad, incluidos soldados, policía federal, policía estatal y agentes locales. Sin embargo, este aumento de fuerzas de seguridad solo ha servido para lograr periodos temporales de calma. Los analistas dicen que el fracaso se debe a varios motivos.
Primero, porque los soldados y la policía paramilitar federal a menudo carecen de recursos para la investigación para perseguir a los criminales, que muchas veces evitan su captura escondiéndose en barrios donde reciben apoyo y cobertura.
En segundo lugar, la recesión económica y la continua llegada de dólares del narcotráfico hacen que el Ejército de sicarios se renueve continuamente, por muchas muertes que haya entre sus filas.
Y tercero, la corrupción se sigue extendiendo entre los policías, aunque haya habido despidos.
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