EL SALVADOR. Proyecto de construcción de pozos de agua. © Javier Bauluz. Piravan
El Ayuntamiento de Madrid, la Generalitat Valenciana, la Comunidad de Murcia han reducido drásticamente sus partidas de ayuda al desarrollo, por la crisis. Esa crisis se está llevando por delante el dinero de la cooperación. Primero fue el gobierno con el anuncio de un recorte de 600 millones de euros, poco después sumó otros 200 millones. Ahora son comunidades, ayuntamientos, y diputaciones quienes tienen que echar cuentas, entre todos aportan unos 670 millones de euros, el 12 por ciento del total de la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD).
El Ayuntamiento madrileño ha ratificado que no va a convocar las subvenciones de Cooperación al Desarrollo ni este año, ni el que viene. En Valencia el recorte del 30 por ciento se suma al del 35 por ciento que ya se había realizado respecto al año pasado, denuncia la Coordinadora Valenciana de ONGD, ” lo que sitúa la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) en el 0.21% del presupuesto de la Generalitat muy lejos del 0,7% establecido en la Ley valenciana de cooperación”. En el caso de Murcia, una reducción casi del 60 por ciento deja a la comunidad en la cola de España, asegura la Coordinadora murciana. “La AOD de la Región representa tan sólo el 0,038% del total de presupuesto consolidado de la administración general de la Comunidad Autónoma. Lo que supone un esfuerzo de poco más de un euro por habitante y año“.
Para la Coodinadora ONGD de España es “inadmisible, y éticamente reprobable, que las medidas para luchar contra la crisis financiera se dirijan en contra del Desarrollo Humano y de los Objetivos del Milenio. Por principios y por coherencia. Por principios como la justicia social, la defensa de los derechos humanos y la solidaridad con los más débiles. Por coherencia con todos los compromisos firmados, internacionales, nacionales y locales, por nuestros gobernantes y políticos, empezando por la Declaración del Milenio, siguiendo por el Pacto de Estado contra la Pobreza y terminando con los pactos y compromisos de las administraciones autonómicas y locales”.
Ante los recortes ya anunciados, los que podrían venir, y las declaraciones públicas de personalidades como la número dos del PP, María Dolores de Cospedal, pidiendo que se resten otros 400 euros para que no tengan que congelarse las pensiones, o Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la patronal, recomendando al Gobierno que reduzca la ayuda a 2500 millones de euros (el Gobierno ha destinado 5.200 millones este año), la Coordinadora de ONGD de España ha elaborado un manifiesto con el que pretende frenar el efecto cascada que está provocando el recorte del Gobierno. “No ha tenido en cuenta el efecto que ha tenido a nivel autonómico y de gobiernos locales en un país donde la Ayuda Oficial al Desarrollo está bastante descentralizada. Esa ayuda está también muy capilarizada y tememos que el efecto dominó puede llegar a ser realmente preocupante para el sistema de cooperación”, asegura Antonio González, portavoz de la Coordinadora.
El manifiesto, que lleva el nombre de “las personas primero ante la crisis”, defiende que “la cooperación no es un lujo, ni una limosna cuando las arcas están llenas sino un compromiso político” recuerda González. Y eso hay que cumplirlo. “Es una necesidad vital para millones de personas, es un imperativo ético y moral que responde a criterios de justicia, además de constituir un compromiso firmado y una obligación de los poderes públicos. Detrás no hay estadísticas, ni porcentajes… Hay pueblos, comunidades, sociedades, personas, alimentos, pozos de agua, escuelas, medicamentos, centros de salud…”, dice el manifiesto
Una de las principales preocupaciones de las ONG es que no se toquen las partidas esenciales dirigidas a programas de educación, salud reproductiva, saneamiento de agua, igualdad de género y alimentación, aunque el Gobierno no lo ha concretado, sí existe el compromiso de que sólo se realizará en las aportaciones destinadas a los organismos multilaterales, que habían crecido en los últimos año, como el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). “El Gobierno no va a tocar aspectos críticos de la ayuda oficial al desarrollo y eso es positivo. Pero no disminuir las ayudas multilaterales también puede tener efecto dominó entre otros estados europeos ya que España ha sido líder a la hora de defender el 0,7 por ciento y la necesidad de un compromiso contra la pobreza, es un mensaje erróneo”.
El Manifiesto pide a los líderes políticos y de gobierno de las administraciones e instituciones públicas que:
1 Impulsen medidas de lucha contra la crisis que se dirijan prioritariamente hacia los responsables y causantes de la misma mediante la creación de una tasa a las transacciones financieras, medidas fiscales que recaigan sobre quien más tiene y recortes que no actúen contra el gasto social y la economía productiva.
2 Reiteren su compromiso con la lucha contra la pobreza, con el Desarrollo Humano y con los Objetivos del Milenio, manteniendo sus compromisos de Ayuda Oficial al Desarrollo tanto a nivel estatal como en las administraciones autonómicas y locales en las que la participación y vinculación de la sociedad civil con la cooperación al desarrollo es aún más cercana y directa.
3 Y a aquellos de nuestros gobernantes y políticos -en el estado, comunidades autónomas y ayuntamientos- que han anunciado medidas de recorte en este sentido les pedimos que tomen conciencia de sus actos. Y de sus consecuencias. Y rectifiquen.
Puedes firmarlo aquí.
¡Es un Honor Estar con Obrador!
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