Ciudad de México, 09 de Marzo.- En una convocatoria a los medios de comunicación, el vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) monseñor, Rogelio Cabrera fijó su postura sobre este tipo de delitos realizados al interior de la Iglesia y que salieron a la luz a raíz del caso Marcial Maciel.
“Nuestra posición es que ningún obispo debe ser obstáculo para la aplicación de la ley, creemos que estamos suficientemente claros y por ningún modo podemos encubrir situaciones que vayan en contra del bien de las personas. Siempre consideraremos la pederastia como un crimen abominable” indicó el prelado.
Acompañado por el secretario de la CEM, monseñor René Rodríguez, el padre Rogelio Cabrera insistió en que la iglesia no va a negociar en “lo oscurito” con ninguna víctima pero también dijo desconocer algún caso de pederastia realizado por los sacerdotes.
Arturo Damián, reportero
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