Pronunciamiento RTDT

 

                                                                               Ciudad de México a 8 de Octubre de 2009

 

 

Lic. Felipe Calderón Hinojosa

Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos

 

 

 

Señor Presidente:

 

Por medio de la presente, la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos  los Derechos Para Todas y Todos”, conformada por 65 organizaciones en 21 Estados del país nos dirigimos a usted para manifestarle nuestra preocupación por las actitudes xenofóbicas, discriminatorias y el hostigamiento de cierto sector de la población y medios de comunicación de que han sido sujetos las personas  migrantes  en la ciudad de Saltillo Coahuila.

 

El 30 de septiembre del presente año, un joven de origen hondureño, de nombre Reyes Gustavo Ardón Alfaro, presuntamente asesinó a acuchilladas a Perla Judith Quintero Caballero, mujer saltillense de veintiséis años de edad e hirió de gravedad a Leslie Flores, quien era la empleada doméstica de la hoy occisa.

 

A partir de este lamentable caso, las personas migrantes han sido sujetos continuos de actitudes xenofóbicas y discriminatorias; al mismo tiempo, el equipo de trabajo de Belén, Posada del Migrante ha sufrido el hostigamiento de cierto sector de la sociedad y de medios de comunicación.

 

Afirmamos esto, porque desde que se conoció la noticia, los medios de comunicación dieron mayor relevancia a la nacionalidad y estado irregular del presunto victimario, que la hecho del delito, estos mismos medios responsabilizaron a Belén, Posada del Migrante de el hecho delictivo, pues argumentan que la ayuda Humanitaria favorece la presencia de personas migrantes en situación irregular, a quienes se califica como delincuentes, o delincuentes en potencia, con esto se lleva a la población a ver la migración como un acto criminal, y a los migrantes como delincuentes, además, se ha emprendido por algunos medios de comunicación una campaña de desprestigio y acoso en contra del fundador de Belén, Posada del Migrante, Padre Pedro Pantoja Arreola, y se ha cuestionado la legalidad de la ayuda humanitaria ofrecida den el albergue y la existencia misma de éste.

 

Como resultado que se dio en los medios de comunicación de la noticia arriba mencionada, comenzaron los ataques de la comunidad en contra del albergue y contra la población migrante, estos ataques, son los siguientes: el viernes 2 de octubre  alrededor de las once de la mañana un hombre se paró fuera de la puerta del albergue Belén, Posada el Migrante y gritó frente a ella, que todos los que  se encontraban adentro eran unos asesinos y agredió verbalmente a uno de los migrantes refugiados en el albergue  cuando  tuvo que salir del albergue, el mismo día  aproximadamente a las ocho de la noche otro hombre se paró también a las afueras de Belén y gritó de nueva cuenta, que todos aquellos que estaban dentro del albergue eran asesinos; el sábado 3 de octubre por la mañana las agresiones se incrementaron y un hombre llegó hasta la puerta de la Casa, rompió dos botellas de vidrio y amenazó con herir a las personas migrantes, calificándolas, una vez más, de asesinos.  El 4 de octubre una mujer fue a la casa de una familia mexicana que hospeda a tres migrantes hondureños, para gritar que quienes habitaban ahí eran posibles asesinos y para exigir que se fueran de la ciudad y que el Instituto Nacional de Migración los deportara inmediatamente, ese mismo día por la noche un migrante fue golpeado en la estación del tren por dos individuos que le dijeron que eso merecía por que un hondureño había matado a una mexicana. Hemos tenido conocimiento además, de que existen distintos grupos de personas que se están organizando para atentar contra la seguridad del Padre Pedro Pantoja y Belén, Posada del Migrante, propiciando un hecho que atemorice a las personas migrantes y las haga salir del albergue.

El día 6 de Octubre el congreso local aprobó un punto de acuerdo presentado por exdiputado Carlos Ulises Orta, sobre una solicitud al Congreso de la Unión para que se realicen propuestas para modificar la Ley General de Población, para regular de manera clara la situación de las llamadas casas del migrante, de las cuales se afirma que “aprovechan el argumento de los derechos humanos de los migrantes para evitar en todo caso, el actuar del Instituto Nacional de Migración sobre ellos.  Sin embargo, el eterno conflicto entre los derechos humanos de las personas que se dicen víctimas o perseguidos, y los derechos humanos de quienes en un momento dado sufren un daño o delito cometido por los primeros, se vuelve a verificar en este caso”. Y se agrega “Sin embargo, debe quedar claro que no hay que revolver las cosas: ¡Los Derechos Humanos no pueden sustentarse o edificarse sobre la base de violar las leyes y los reglamentos, o sobre el principio de atropellar los derechos de otros!” (…) debemos dejar de ver la aplicación de la ley  y la protección de los nuestros, como algo que “viola los derechos humanos de los extranjeros”.

 

Las personas migrantes en tránsito por México han sido siempre sujetos vulnerables, con posibilidades mínimas de acceso a la justicia, víctimas de innumerables delitos y violaciones a sus Derechos Humanos. En este clima creado de descrédito a la población migrante y a la labor de las Casas del Migrante y de los organismos defensores de los Derechos Humanos de las personas migrantes, se hace evidente que el derecho a la vida, a la seguridad y a la integridad de todos estos sujetos está en claro riesgo.

Por lo anterior, solicitamos:

 

Pronta intervención para detener la campaña xenofóbica, discriminatoria, racista y criminalizadora contra la población migrante irregular que vive y/o transita en Saltillo, Coahuila y en todo México.

Se garantice la integridad y seguridad personal de los defensores de derechos humanos de Belén, Posada del Migrante.

 

Atentamente,

 

Edgar Cortez

Secretario Ejecutivo

 

 

 

 

Ccp.

 

Dr. José Luis Soberánes Fernández

Comisión Nacional de Derechos Humanos

 

Ing. Perla Bustamante

Presidenta del Conapred

 

Alberto Brunori

Rpte.  En México de la Oficina del  Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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